Cancún.- Con el semáforo naranja, se reactivaron algunas misas presenciales en alrededor de siete de cada 10 iglesias en la zona norte de Quintana Roo, las cuales deberán seguir estrictas acciones de sanidad entre las personas que asistan.

Pedro Pablo Elizondo Cárdenas, obispo de la Diócesis Cancún-Chetumal, explicó que los sacerdotes están teniendo mucha precaución para retomar actividades en las diversas iglesias, parroquias y capillas, ya que no todas han finalizado sus protocolos de desinfección, o bien, consideran que puede conllevar un riesgo.

“Claro que nosotros tenemos una ventaja, que tenemos iglesias abiertas, no tienen paredes y la gente puede estar afuera y escuchar la misa tranquilamente, incluso pueden hacerlo desde el estacionamiento, dentro de su coche, como en el autocinema”, dijo.

Pese a que el semáforo naranja ha permitido la apertura de algunas iglesias al 30%, el obispo señaló que se continuará transmitiendo la Eucaristía a través de redes sociales, radio y televisión para que las personas -como los adultos mayores, mujeres embarazadas y toda población de riesgo- puedan quedarse en casa.

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Indicó que, en cuanto al aforo, la instrucción del personal es aplicar el protocolo de higiene al entrar (limpieza de zapatos, medir temperatura y aplicar gel antibacterial) y acomodar a los feligreses en los lugares indicados; una vez que estos están llenos, se indica que ha cumplido el aforo permitido. 

#NuevaNormalidad | Así se toman las medidas sanitarias durante la celebración dominical en la catedral de #Cancún.

Foto: Paola Chiomante/SIPSE pic.twitter.com/KjXPihdjdM

— Novedades de Q.Roo (@novedadesqroo) June 14, 2020

“No se va a tener ningún privilegio, ni vamos a permitir ‘reservar’, es como vayan llegando, por eso se han añadido más misas, y la gente sensatamente solita se va a su lugar, pese a que algunos temían que fuera a haber alguna aglomeración”, dijo.

De acuerdo con las reglas de la “Nueva Normalidad”, los fieles tendrán que utilizar todo el tiempo cubrebocas, mantener su distancia, recibir la hostia en la mano -previo a la aplicación de gel- y abandonar el recinto de manera ordenada.

Las confesiones se realizarán en espacios abiertos y con un acrílico de por medio entre la persona y el sacerdote.

¿Qué pasará con las fiestas religiosas?

Sobre las fiestas patronales, mencionó que al igual que las celebraciones de comuniones, XV años, bautizos y bodas, se están posponiendo.

“No se cancela nada, se están reagendando a partir del 15 de junio; pero una boda, en lugar de tener 500 invitados, se reducirán a 10 o 20, todo se reajusta y se reagenda. Esperamos que para noviembre la fiesta de los 50 años y de la nueva Diócesis se pueda llevar a cabo, pero es muy difícil hacernos la ilusión de que será multitudinario, lo vamos a hacer pero en privado, en chiquito y de manera restringida”, concluyó.