Proeza en mar abierto a favor de la infancia

Patricia Guerra cruzó de Cozumel a la Riviera Maya para ayudar a las guarderías del IMSS.

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El mal tiempo no impidió que la intrépida nadadora consiguiera su cometido. (Octavio Martínez/SIPSE)
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Octavio Martínez/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- Con todo y el mal tiempo, Patricia Guerra Menéndez completó ayer su cometido de cruzar nadando en mar abierto, el tramo marítimo entre Cozumel y Playa del Carmen; con el único fin de ayudar a dos mil niños de las guarderías del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).

Tal como se tenía planeado desde días antes, Patricia Guerra se presentó a las 6 horas en playa Palancar, de Cozumel, donde inició la travesía, acompañada a distancia de su equipo multidisciplinario.

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Al principio, el equipo de Guerra Menéndez, había calculado que la nadadora haría el recorrido, de aproximadamente de 21 kilómetros entre Playa del Carmen y Cozumel, en seis horas, sin embargo los embates en altamar por la llegada del frente frío número 8 fueron un obstáculo.

En el trayecto, estuvo acompañada durante lapsos por Mónica Ramírez Blancarte, quien fue su coequipera. El mal tiempo, ocasionó que por momentos en vez de avanzar, retrocediera rumbo al objetivo final.

Sin embargo, la atleta logró franquear, de manera determinante; y al final arribó a playa Inah, cerca de Xcaret, alrededor de las 16:52 horas; el plan original era llegar a las playas del complejo Mayakoba.

En el trayecto estuvo acompañada durante lapsos por Mónica Ramírez Blancarte. (Octavio Martínez/SIPSE)

Al término de la hazaña, Patricia Guerra, quedó totalmente exhausta, por lo que Mónica Ramírez fue quien dio sus impresiones al llegar a la playa de Mayakoba, hasta donde llegaron a bordo de una embarcación, procedentes de playa Inah donde tocaron tierra.

“Vi a Patricia como una guerrera, nunca se echó para atrás, a pesar de las condiciones (…) creo que iba pensando en esos dos mil niños (...) tendrá un descanso activo en alberca”, comentó.

Durante el trayecto, Patricia Guerra realizó un aproximado a 35 mil brazadas en las aguas mexicanas.

El objetivo fue recaudar fondos para los niños de las guarderías del IMSS, a fin de implementar el Programa SÍ, que los ayudará a prevenir enfermedades cardiovasculares durante su camino a la edad adulta.

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