Abigail Becerra/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- En el estado no se cumple con el uno por ciento de las viviendas proyectadas en conjunto habitacional con características necesarias para las personas con discapacidad, pese a que fue aprobada la Ley de Vivienda en la entidad.

En noviembre del año pasado, la Décimo Tercera Legislatura del Congreso de Quintana Roo aprobó la Ley de Vivienda y la Ley de Fraccionamientos de Quintana Roo, en la cual las empresas constructoras deben edificar este porcentaje para las personas con discapacidad y con movilidad menor, pero la realidad dicta lo contrario, dijo Juan Carlos Pereyra Escudero, presidente diputado de la Comisión de Desarrollo Urbano y Asuntos Metropolitanos.

Comentó que esperan que con la buena voluntad de las constructoras cumplan con lo establecido en la ley que permanece vigente y operante.

Carlos Hernández Guillén, de 37 años, y empleado administrativo en una empresa de transportación, a la fecha le es imposible conseguir una vivienda adaptada a su condición física.

Ahora se encuentra en una silla de ruedas a causa de un accidente automovilístico provocado por un familiar que viajaba en estado etílico hace 15 años, situación que le cambió la vida para siempre.

Uno de los grandes impedimentos que vive a diario es la falta de infraestructura accesible tanto en la ciudad como en su propia casa, la cual comparte con sus padres, ambas son las limitantes, dijo, más sentidas a las que se enfrenta diariamente.

Con los años se convirtió en una persona independiente con trabajo y vida social como cualquier persona; sin embargo, la idea de obtener su propia vivienda como consiguió su empleo y automóvil, es el siguiente objetivo que planea cumplir.

Desde los 25 años cuando se convirtió en una persona económicamente activa sin importar su condición física, Carlos obtuvo todas las obligaciones, así como todos los derechos por pertenecer a la fuerza laboral del estado y entre ellos el derecho a la vivienda.