Durante los últimos años, se ha "puesto de moda", que adolescentes  y jóvenes consuman bebidas energizantes durante el día en lugar de tomar agua.

Por lo que cada vez más, se incrementan casos de paros cardíacos o arritmias en este  sector de la población, indicó la especialista Angélica Méndez.

“Llegan a consumir entre cuatro a cinco bebidas energéticas, de diversas marcas, siendo la favorita la monster, la cual puede causar agitación, confusión, alucinaciones. convulsiones y hasta diarrea", afirmó.

Explicó  que ponen cómo pretexto que quieren rendir más en el gimnasio para cargar más peso, también para quedarse despiertos durante más horas en los días previos a los exámenes para estudiar.

Pero además también significa un gasto importante, pues la bebida más económica cuesta 25 pesos, y  llegan a precios de 140 pesos por unidad.

 

Algunas utilizan slogans que ya en sí son bastante peligrosos como "Súbete al cohete y Disfruta el viaje".

Cada lata suele tener entre 100 y 300 mg de cafeína y otros ingredientes como Taurina y exceso de azúcares.

El límite diario para un adulto, según la Organización Mundial de la  Salud, es de 400 miligramos, y tan sólo dos latas pueden  sobrepasar la dosis segura.

Pero, si se trata de un fin de semana, se incrementa hasta ocho latas, las cuales  combinan con alcohol.

Muchos jóvenes consumen en discotecas o fiestas los famosos "azulitos",  mezcla de bebida energética, vodka, refresco, chile en polvo y jarabe.

Este cóctel ha ganado popularidad en México debido a su llamativo color, pero es una bomba para el cerebro. Los jóvenes también combinan alcohol y energizante con guaraná, porque creen que es afrodisíaco.