Hace muchos años, el matrimonio era algo que se consideraba sagrado, entonces que una familia prevaleciera junta era algo muy bien visto desde distintas perspectivas, pero en la actualidad es muy común que por una diversidad de motivos las personas se divorcien. El divorcio va más allá que sólo el título de este o que un acta, ya que al tener hijos nacen derechos y obligaciones.

La extinción de este acto no excusa el incumplimiento de las obligaciones que se generó al tener un vínculo durante el matrimonio, es decir: La responsabilidad de los hijos.

El artículo 167 del Código Penal del Estado de Quintana Roo, menciona que al que incumpla con la obligación de dar alimentos a las personas que tienen derecho conforme al Código Civil, se le impondrá uno a cinco años de prisión y suspensión o privación de los derechos de familia en relación con la víctima o el ofendido y pago como reparación del daño de las cantidades no suministradas oportunamente a la parte ofendida, desde la fecha en que dejó de cumplir el deber de proporcionar los alimentos hasta la sentencia condenatoria.

Este delito se tipifica como un delito contra el orden de la familia, hay distintos casos como se menciona en el mismo artículo cuando dado es el caso que uno de los acreedores alimentarios sean personas adultos mayores o enfermas, o incluso si del incumplimiento resultare alguna lesión o la muerte de los acreedores, el delito se perseguirá de oficio.

Algo que es importante destacar es que las sanciones que se mencionaron pueden aumentar hasta una cuarta parte, cuando el deudor alimentista, con el propósito de eludir o suspender el incumplimiento de las obligaciones alimentarias decretadas por autoridad judicial, renuncie, abandone su trabajo, obtenga licencia sin causa justificada o se coloque dolosamente en estado de insolvencia.

El resultado de un matrimonio no deberían ser los culpables de los actos que realizan los padres, al fin y al cabo, lo que van a aportar de sus ganancias son para sus propios hijos, los cuales tienen el derecho de vivir dignamente cubriendo sus necesidades, aunque sea básicas.

Antes las personas no tomaban esta situación de una manera seria, ya que no se les imponía sanción severa, pero ahora con este artículo, sabemos que de verdad es más importante de lo que se creía.

Apoyemos esta situación legalmente, porque a falta de ella, hay niños en la calle, o que les hacen falta recursos alimenticios, no es justo que los padres incumplan con esta responsabilidad que es tan importante.