Carente de toda lógica económica, la “austeridad republicana” promovida por el presidente Andrés Manuel López Obrador y ejecutada a rajatabla por el secretario de Hacienda federal, Arturo Herrera Gutiérrez, pretende ahorcar a los gobiernos estatales al aplicar recortes multimillonarios a sectores fundamentales, como turismo, infraestructura, el campo y la salud, justo mientras dos terceras partes de las entidades se deslizan velozmente hacia la recesión.

Los alarmantes datos no los exhibió la oposición, ni los conservadores, ni los empresarios “fifís”, sino el propio Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi) en el reporte del segundo trimestre de 2019, en el que 22 de los 32 estados mostró un retroceso económico producto de diversos factores.

En contraste, 10 entidades lograron crecer a pesar de las circunstancias adversas provocadas por las cuestionables decisiones en materia económica del actual gobierno federal. Entre este grupo minoritario se ubicó Quintana Roo, que ha logrado mantener el ritmo ascendente pese a los recortes, la cancelación de recursos federales para el Turismo y el flagelo de la inseguridad.

De hecho, es Quintana Roo el único faro de crecimiento económico en la zona sur-sureste, ya que las demás entidades de la región registraron números negativos.

Sin embargo, incomprensiblemente la mayoría de los estados que registran crecimiento están siendo castigados en sus presupuesto de 2020 por la federación, que a su vez favorece a las entidades menos productivas.

En estricta justicia, el pacto federal permite esta distribución nada equitativa para permitir a los estados con mayor rezago suplir sus necesidades, pero tampoco se puede descuidar a aquellos que son el pilar y motor de la economía nacional.

Ya los gobernadores del PAN, entre ellos Carlos Joaquín González, alzaron la voz contra la política económica de la 4T advirtiendo que estos recortes provocarán una carencia presupuestal que afectará el crecimiento económico de sus estados, acentuando la posibilidad real de una recesión nacional.

¿Acaso será lo que quiere el gobierno federal?

El Rebote

Y los legisladores federales quintanarroenses de Morena, sobre el magro presupuesto no dicen ni pío. No los vayan a regañar.