Malecón Tajamar es el nombre que le designaron al manglar ubicado enfrente de la laguna Nichupté, detrás de plaza Las Américas, área a la que todos los ciudadanos podían acudir sin problema. ¿Pero a qué se debe la destrucción que actualmente encontramos en este lugar?

Se denomina ecocidio a la acción que ejercieron en contra de esta reserva natural, proyecto de 58 hectáreas, urbanizado a nivel federal para posteriormente ser lotificado y venderlo a desarrolladores inmobiliarios de más de 20 empresas privadas. Pues si bien han pasado poco más de tres años y aún no dan una resolución definitiva.

¿Qué es lo que se pretende construir en esta área si dictan sentencia a favor de inversionistas?, pretenden construir una catedral, oficinas de origen italiano y así como gran parte de comercio extranjero. Quien realizó la venta fue Fonatur en favor de las empresas privadas, cuyos permisos estaban en perfecta actualización, sin embargo, debido al cambio de la Ley General de Vida Silvestre, en el artículo 60 Ter, donde se establece lo siguiente: “Queda prohibida la remoción, relleno, trasplante, poda o cualquier obra o actividad que afecte la integridad del flujo hidrológico del manglar; del ecosistema y su zona de influencia...”, se vieron impedidos los inversionistas a continuar, ya que haciendo uso de esta reforma, comenzaron las denuncias de la ciudadanía.

El acceso a Tajamar estuvo bloqueado debido a que mientras se lleva a cabo un litigio, la parte actora puede tomar medidas preventivas, en este caso, en virtud de que más de 40 camiones y vehículos de carga pesada ingresaron a Tajamar la madrugada del 16 de enero del 2016 rellenando los manglares, la asociación “guardianes del manglar Cancún” solicito bloquear el acceso vial, sin embargo, no el peatonal.

El presidente de la Comisión de Desarrollo Inmobiliario del Consejo Coordinador Empresarial del Caribe, Miguel Ángel Lemus, hacía mención que actualmente es difícil lograr el rescate del proyecto de Tajamar Cancún, sin embargo, los inversionistas continúan en espera de la resolución de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) toda vez que actuaron de buena fe.

Las resoluciones que se han dictado hasta ahora son que la Semarnat no otorgue más permisos, pese a esto, la Semarnat manifiesta tener soluciones con relación a esta sentencia, pues bien podría ocupar elementos para modificar la ley del mangle a efecto de que se pudiera dar procesos por medio de compensación de mangle o económica.

Este conflicto se originó debido a que menos de 3 propietarios realizaron de forma ilegal sus acciones, sin embargo en estos últimos meses la situación ha quedado en una conciliación entre el gobierno municipal de Benito Juárez, encabezado por Mara Lezama y le activista Katherine Ender, tras haber participado en el evento “Limpieza de residuos sólidos urbanos en callejón Tajamar”, así también en que el nuevo titular de Fonatur Rogelio Jiménez Pons considera que pueden llegar a un arreglo pero aún no se define dicha situación.

Actualmente quedamos en espera de la resolución de la SCJN, pues a pesar de que ambas partes tienen derechos, la revisión debe fundamentarse bajo distintas perspectivas haciendo valer la lógica jurídica.