La inteligencia policial tiene como fin la obtención de información que ayude al estado combatir al crimen y garantizar la seguridad al ciudadano.

La inteligencia policial es muy útil cuando se trata de combatir al crimen y garantizar la seguridad véase como ejemplo a la policía de Yucatán. Esta inteligencia debe ser realizada por parte de los organismos policiales respectivos de cada orden jerárquico.

Quien conoce el monstruo desde sus entrañas puede planear la estrategia para combatirlo.

Se debate mucho en los medios por parte de las autoridades el tema de la percepción de seguridad por eso se piensa que a mayor presencia policiaca mejores resultados y esto no es así de nada sirve 1000 policías o militares si no se tienen información cierta y precisa de los delincuentes. Las cifras son un resultado de algo, pero para lograr la estadística previamente debes tener una estructura y una visión clara de la estrategia frente a la delincuencia.

En el Estado no se tiene una estrategia clara contra la criminalidad. No ha habido un consenso de todos los estamentos de seguridad y las autoridades competentes en definir el rol de seguridad de cada uno, tan es así que se ha recurrido a personal militar para hacer el trabajo de las policías.

Puedes tener la definición de un rol, pero no basta saberlo. Cuando defines los roles de cada cual, defines también el funcionamiento y eso debe entrelazarse y se tiene que armonizar con un propósito común, falta coordinación en materia de seguridad, donde no solo se definan los roles, sino que tengan claridad desde las autoridades policiales hasta el Ministerio Público de los objetivos que tienen que perseguir a corto, mediano y largo plazo.

Hay nuevas amenazas que se presentan en el estado que había que analizar qué tan atractivo es éste para los delincuentes. Considerar las vertientes particulares, el crimen común y el trasnacional porque somos un estado eminentemente turístico, En base a esto se tiene que establecer estrategias de seguridad. La común, que es la más visible y que está en el día a día, pero hay otra más complicada, agresiva y menos visible que ya socava las instituciones y el Estado democrático. Sobre ella es que se debe basar la estrategia de seguridad.

Se debe apostar a la inteligencia, no necesariamente se necesita militarizar la seguridad, sino ubicar unidades especializadas en cada tema para entender lo que está pasando en cada lugar y luego distribuirlos a lo largo y ancho del estado, Yucatán es ejemplo de esto son policías locales los que combaten el crimen en ese estado y garantizan la seguridad interior.

La gran ventaja que pueden tener los organismos de inteligencia y seguridad del Estado es su anonimato. Si se deja el anonimato, la función específica se pierde. Si el anonimato se pierde se persigue ya no, Un objetivo de Estado, sino que la percepción es que se van persiguiendo objetivos específicos del gobierno de turno.