La oposición sí tiene estrategia
En un muy agrio video-opinión de Joaquín López Dóriga, pareciera que el periodista reclamara molesto...
En un muy agrio video-opinión de Joaquín López Dóriga, pareciera que el periodista reclamara molesto a la oposición (entiéndase PAN-PRI-PRD) por qué ha retrasado tanto sus tiempos políticos en comparación con Morena que está a punto de “destapar a su corcholata rumbo a la presidencia”, y hasta hace alusión al refrán: “Cuando veas a tus enemigos hacer pen…déjalos” (sic).
Amén que lo hecho por López Dóriga (a quien considero un extraordinario periodista) no es algo que corresponda a los comunicadores, lo cierto es que habría que ver quién es el que hace “pen…” al final de estas cuentas.
Y es que a López Dóriga quizá se le olvida que a veces el silencio también habla, el silencio también es una forma de expresión, y hasta una cualidad que saben utilizar muy pocos. En ocasiones es mejor quedar callado y observar, sobre todo cuando se trata de una competencia o una pelea y eres el rival más débil (como es el caso).
Aquí, en esta entrega, tratamos de apegarnos lo más posible a la imparcialidad o al menos no volcarnos tanto a favor o en contra de ninguno de los lados.
Dicho lo anterior, creemos que la estrategia del PRI-PAN-PRD no es tan mala ni tan absurda ni tan valema…, como lo pinta el periodista. Estos tres partidos con muchos años de existencia (especialmente los dos primeros), esperan que la fuerza política en el poder cometa errores y pague así su novatez.
La oposición está, pues, sentada en su sofá sólo observando la forma en que, de entrada, las corcholatas violan la ley electoral todos los días con actos anticipados de campaña. Pero eso es lo de menos, el PRI-PAN-PRD están convencidos que en cualquier momento la batalla por la candidatura morenista se convertirá en una guerra intestina, en una cena de negros que irremediablemente causará resquebrajamientos al interior.
A la oposición se le puede ver hoy como un felino que, escondido, acecha a su presa, la observa, la sigue, y espera el momento justo, la distracción, el error para soltar el zarpazo.
Y la estrategia de esos partidos no es mala, primero porque difícilmente los aspirantes a la candidatura morenista llegarán a un acuerdo en buenos términos para tomarse de la mano, como buenos samaritanos, y llegar a la anhelada unción. Y no lo harán porque ese no es el ADN de Morena, no, Morena es un partido que fue creado con base en la confrontación, en el jaloneo, en la diatriba… y en la traición.
Esa es la esencia del morenismo y a eso le apuesta la oposición: A la pugna, al resquebrajamiento, a la descomposición de un partido como Morena que nació con el único fin de llevar a AMLO a la presidencia y que muy temprano lo logró. ¿Y ahora qué?
Está visto que la oposición estirará la liga lo más posible, como una estrategia político-electoral bien pensada.
Alguna vez una política ex priista y hoy morenista me dijo: “Ten en cuenta que no es lo mismo AMLO y Morena. AMLO está muy bien posicionado, Morena no tanto”…
La oposición deberá actuar con mucha prudencia, con mucho tino para lograr una elección cerrada en 2024.