Los tweets del pasado regresan para cazar a la ideología del presente. Lo que escribimos hace muchos años en la red social, reaparece y nos da un choque de realidades pocas veces soportable, y en todas, de cáliz vergonzoso.

En redes sociales, pero especialmente en Twitter, los apologistas y detractores de la así llamada #CuartaTransformación se desviven por evidenciar las falacias del contrario. Todos los días salen comentarios a propósito de las palabras del presidente en la #ConferenciaMañanera, ahondando la ya de por sí existente división entre los bandos.

Una de las armas en esta guerra de declaraciones está justamente en la plataforma digital: el historial de tweets. Cual si fuera la voz de nuestra conciencia e ideas pasadas, cuanto más candente se pone el tema (como el número de ejecuciones en el país y la #GuardiaNacional) con mayor rapidez salen los “pantallazos” para demostrar que, quien ayer crítico las acciones en los gobiernos de @FelipeCalderon y @EPN, hoy defiende las mismas políticas; del otro lado, el que calló durante los pasados gobiernos, hoy tweetea como desmesurado.

Esto puede resultar curioso para los más jóvenes, que son además quienes deben de cuidarse mejor en redes sociales. Muchos de nosotros, los #xennials, hemos estado en redes sociales desde sus primeros días, y por ende, el historial de tweet es muy, muy amplio, tanto como las experiencias que decidimos compartir y que nos guste o no, han cambiado nuestra forma de pensar.

Es evidente que lo que tweeteamos en 2009 no tiene la misma ideología y contexto diez años después, por tanto es criticable que se señale como incongruencia, sin embargo, lo que sí es desdeñable es que actuemos como si nunca se hubiera escrito ese tweet. Con la diaria disputa que genera el nuevo @GobiernoMX, todos aquellos que nos encontramos en las lides de la política o análisis social, estamos expuestos a los pantallazos y debemos afrontarlos con dignidad: aceptar que sí escribimos eso y explicar el concepto, y en su caso aceptar que cambiamos y por qué.

Tristemente los ideólogos de la así llamada #CuartaTransformación no están dispuestos a aceptar esto. Prefieren ignorar o en el mejor de los casos, descalificar a quienes los evidencian y hacer, literalmente, como que les habla el mesías para justificar sus actos de incongruencia. ¿En qué afecta esto a nuestra vida digital? Sencillo: en que poco a poco se tiende a ignorar nuestro propio pasado en redes sociales, a actuar como si nada de lo escrito existiera, haciendo de nuestra vida digital un acartonado personaje sin pasado ni futuro: unos cínicos.

Ese cinismo es el que contamina a las esferas twittera del nuevo gobierno. Basta recordar el bajo nivel que @JimenezEspriu y @CarlosUrzuaSHCP, titulares de la SCT y SHCP, respectivamente: el primero, en el “debate” con @JoseAMeadeK respecto al NAIM, denostando con expresiones como “triste hombre”; y el segundo, afirmando que no hay “gasolinazo” porque no es “alza”, sino un ajuste… algo así como Los Simpson con el “ajuste temporal reembolsable” de la presidenta Lisa.