La orfandad del PRI

El Partido Revolucionario Institucional (PRI) llega al proceso electoral ordinario completamente solo...

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El Partido Revolucionario Institucional (PRI) llega al proceso electoral ordinario completamente solo, y su aliado en los últimos 14 años, el Partido Verde, va con su principal rival de contienda, Morena.

Para el tricolor el panorama no es nada halagador, está a punto de perder el registro en el estado y se prevé que no gane ni una sola diputación de mayoría relativa, con lo cual podría también perder la representación en la XVI Legislatura.

El partido que gobernó al país por más de 70 años de manera consecutiva va de mal en peor, primero perdió a unos de sus aliados, el PANAL, que no logró mantener el registro en la elección del 2018, ahora el PV le da la espalda así como decenas de militantes que han saltado a Morena.

Otros se han declarado independientes pero de facto trabajan ya para Morena, siglas que darán cobijo a todos los priistas de la entidad en esta y en la contienda electoral del 2022.

Por lo que se refiere al amasiato del tricolor con el PV en Quintana Roo, inició en el 2005 en la elección en la cual compitió Félix González Canto por la gubernatura y Francisco Alor por la presidencia municipal de Benito Juárez.

De ahí en adelante fueron unidos en todas las elecciones constitucionales tanto locales, intermedias y federales.

El posicionamiento del Partido Verde en primer momento en Benito Juárez y luego en la entidad, se debe a la postulación, en el 2002, de Juan Ignacio García Zalvidea en Cancún, quien los sacó del hoyo en el que se encontraban y los ubicó como segunda fuerza, por encima del PAN y PRD.

Ahora el PV, aliado fiel del tricolor en los malos gobiernos y fraudes cometidos a los quintanarroenses, no quiere cargar con el repudio de los electorales, y se adhiere a Morena para competir en la elección de junio próximo para renovar el poder legislativo de Quintana Roo.

Pero no todas son malas noticias para los priístas, puesto que lo único que han hecho es trasladar sus oficinas a Morena. Basta recordar que la gran mayoría de los candidatos del nuevo partido en la entidad electoral del 2018 fueron priístas.

En tres de los cuatro distritos electorales federales se postuló a ex priístas, así como en la presidencia municipal de Othón P. Blanco, capital del estado.

En la contienda electoral de junio próximo la situación será similar y Morena postulará a verde ecologistas y priístas para los XV distritos uninominales, con lo cual, como dije, será únicamente un trasladado de oficinas por parte de los priístas.

No dude usted querido lector que en las elecciones del 2022 para renovar la gubernatura, Morena postule a un ex priísta para suceder a Carlos Joaquín. Hasta la próxima.

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