Sylvia Earle y el Scuba Fest Cozumel

Regresamos a casa después de pasar casi una semana completa en uno de los sitios más bellos de Quintana Roo...

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Regresamos a casa después de pasar casi una semana completa en uno de los sitios más bellos de Quintana Roo: Isla Cozumel; y de pasar también unos días en uno de esos eventos que realmente valen la pena, y de los cuáles debería haber muchos más en nuestro Quintana Roo: el Scuba Fest.

Las personalidades que han desfilado en los últimos días en Cozumel son dignas de llamar la atención: entre muchos otros destacan Arturo Bayona, quien trabaja para el proyecto del Gran Acuífero Maya, financiado por National Geographic, Jerónimo Avilés, espeleólogo y autor de descubrimientos fascinantes en las cuevas de Quintana Roo, Luis Lombardo, quien trabaja por establecer un refugio de tiburones en el estado, a través de la Organización Saving Our Sharks, Mauricio Hoyos, un especialista en la investigación del Tiburón Blanco, Francisco Pizarro pionero en materia de cine ambiental, director muchos años del festival de cine de Imagen Submarina de San Sebastián y, por segundo año consecutivo, la Dra. Sylvia Earle.

Y destaco la presencia por segundo año consecutivo de Sylvia Earle, porque pocos son los eventos en el estado que pueden presumir de tener a una personalidad del tamaño de ella en nuestros destinos: un ícono, una persona fascinante, un ser que inspira, que motiva, y que, estoy convencido, todo aquel que se precie de trabajar en temas de sustentabilidad y conservación, debería conocer.

El Scuba Fest nace con la idea de fomentar y reimpulsar a Cozumel como destino de buceo, regresar a la Isla el esplendor que tuvo en algún tiempo atrayendo a ese mercado que es de los que queremos en el estado: consciente, de largas estancias, de alto poder adquisitivo, preocupado y ocupado del lugar que visita, y que forma parte de un círculo de turistas con las mismas características, un “buen” turista, pues.

Pero el Scuba Fest es mucho más que un evento para atraer buzos especializados: me atrevo a decir que es un encuentro que permite sumar esfuerzos por la conservación, fortalecer las amistades de líderes que trabajamos en este tema, generar sinergias entre distintos proyectos, dar a conocer no solo el buceo sino otras bellezas poco conocidas pero muy interesantes de la Isla; es uno de esos eventos que sirven para detonar otras iniciativas porque reúne, durante varios días, a lo que se llama “changemakers”, personas que realmente están haciendo la diferencia en su día a día en materia de conservación.

Quienes no lo conocen, han perdido una gran oportunidad de enamorarse o reenamorarse de nuestros arrecifes, de poder tener contacto casi personalizado con gente de la talla de Sylvia Earle, de encontrar que en este mundo de la conservación no estamos solos, de ver que, a nivel local, compartimos retos pero también esperanza con otros sitios del mundo, de pertenecer a una plataforma de personas muy comprometidas por nuestro planeta.

Y creo que este tipo de eventos son los que necesita Quintana Roo, México y el mundo; eventos que nos permitan profesionalizarnos, pero, sobre todo, lograr esas sinergias y ese compromiso de seguir en estos temas, por difícil que ello parezca. Ver a Sylvia Earle, con toda su experiencia, maravillarse con pequeños detalles, siempre dispuesta a dar unas palabras de aliento, abierta a regalar una sonrisa y un consejo, es una de las muchas cosas que hay que agradecer al Scuba Fest, y a todas las personas que lo han hecho posible.

Larga vida pues al Scuba Fest, ojalá nos siga permitiendo, año con año, ser un pretexto para renovar nuestros votos con nuestro planeta, y ojalá eso sea, por muchos años más, con la presencia de Sylvia Earle, un personaje de esos que vale la pena tener cerca por mucho tiempo.

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