No sólo es #YaMeCanse el hashtag más mencionado en los últimos días, a raíz del comentario del procurador general de la República, Jesús Murillo Karam, en rueda de prensa sobre el informe del caso de  Ayotzinapa; es también la frase que expresa el hartazgo y la rabia contra políticos corruptos y la forma en la que el Estado se involucró en esta tragedia.

La frase trascendió y no sólo fue bandera para los estudiantes, sino para denunciar más agravios:  la gente habla de crisis económica, falta de empleo, oportunidades de desarrollo, educación deficiente… .

Pero ante todo este fervor, ¿qué sigue? ¿Cómo canalizar lo que muchos analistas  y la prensa llaman “el despertar de los mexicanos”, para que no sea sólo un tópico en la agenda nacional sino una medida que genere verdaderos cambios?

Entre las respuestas encontramos a la sociedad civil organizada y la aportación de Ulrich Richter Morales, autor del libro “De la protesta a la participación ciudadana”, en el que reconoce el papel más activo de la sociedad al proponer iniciativas de participación inéditas y además de un análisis ofrece propuestas destinadas a mejorar y hacer más eficaces dichas iniciativas.

En este contexto, si comulgamos con el deseo de cambio: informémonos, no perdamos de vista a las asociaciones con verdadera vocación y demos un vistazo a esfuerzos como el de Ulrich.