Padre e hija cruzan el continente americano en apoyo a la niñez

Viajan en motocicleta para reunir 25 mil dólares en beneficio de dos fundaciones canadienses.

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Bruce Johnson y su hija Holly pretenden recorrer siete mil 321 kilómetros. (Harold Alcocer/SIPSE)
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Claudia Martín/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Padre e Hija viajan en motocicleta desde Wasaga Beach, en Ontario, Canadá, con rumbo a Ojochal, Costa Rica. El objetivo del viaje es reunir 25 mil dólares para la fundación Children´s Miracle Network Hospital y el Sick Kids Hospital de Ontario. 

Bruce Johnson y su hija Holly pretenden recorrer siete mil 321 kilómetros, que iniciaron en Canadá, pasando por Estados Unidos y hoy se encuentran en México.

Hasta el momento han visitado en México, los estados de Tamaulipas, Veracruz, Villahermosa, Tabasco, Chiapas y Quintana Roo (Tulum y Chetumal). La ruta continuará en Belice, Guatemala, Honduras y Nicaragua hasta llegar a Costa Rica.

Bruce mencionó que a la fecha han recaudado cerca del 60 por ciento de la meta que se han fijado, gracias al apoyo de los socios de una compañía de bienes raíces que se llama Remax; y de la amable generosidad de quienes se han sumado a la causa.

“La idea de viajar por una causa tan noble es de Holly, nosotros como padres solo la hemos apoyado”, abundó.

Holly quien tuvo que escanear varios libros para no perder su séptimo año (primero de secundaria) contó que la experiencia es inolvidable, pero han tenido frío y calor extremo.

“Hubo un día que nos pasamos más de tres horas y media bajo la lluvia, no se podía ver nada, íbamos muy despacio. Tengo que hacer tareas, pero es poco el tiempo que tengo aun que en cultura general he aprendido mucho. Es una aventura inolvidable y con una noble causa recaudar fondos para que estos hospitales puedan apoyar a más niños. Estoy muy feliz”, comentó Holly.

Los gastos de la cruzada corren por cuenta propia de la familia Johnson; México es el país en que menos han gastado. 

“En México la gente es muy hospitalaria y es el país en que menos hemos gastado siempre hay gente que nos invita a comer, nos da hospedaje, solo lo del combustible hemos gastado. Con 200 pesos llenamos el tanque y llegamos de Tulum a Chetumal, aquí nos han dado hospedaje, alimentación y amistad que perdurara por años”, agregó Bruce Johnson.

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