Ernesto Neveu/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El ex alcalde de Felipe Carrillo Puerto, Sebastián Uc Yam, logró obtener del Juzgado Sexto de Distrito de la capital del estado la suspensión definitiva a favor del amparo promovido en su momento, por lo que pagó tres millones de pesos, con lo que avala que no evadirá la acción de la justicia, pero con la garantía de que no será detenido por autoridades de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE).

Uc Yam es acusado por el empresario Mario González González por el delito de fraude genérico por nueve millones de pesos por la contratación de obras públicas, en la época en que el acusado fungía como presidente municipal. Las obras de realizaron pero el pago, según el agraviado, nunca se realizó.

Leopoldo Herrera Manzanilla, abogado del ex edil, dio a conocer que el juzgado federal resolvió a favor de su cliente el amparo solicitado, asentado con el número 91/2014, el tercero al que Sebastián Uc Yam recurre desde el inicio del proceso, y que lo protege contra acciones ordenadas en su contra por el procurador del estado, Gaspar Armando García Torres, por la subprocuradora de Justicia de la Zona Centro, Blanca Imelda Ávila Várguez, y contra el director general de la Policía Judicial del Estado (PJE), Freddy Castro Piña.

Bajo la protección de la ley federal, Uc Yam no podrá ser detenido por comandantes o agentes de la PGJE mientras persista la suspensión definitiva a su favor, por lo que tendrá libertad para realizar todas las diligencias judiciales programadas como parte del proceso legal que se sigue en su contra.

Hace una semana, en conferencia de prensa la parte acusadora anunció que las horas de Sebastián Uc Yam en libertad, estaban contadas.

Incluso el procurador de Justicia del estado, Gaspar Armando García Torres, se abstuvo de emitir alguna declaración al respecto, para evitar entorpecer el procedimiento que preparaban para capturar al ex presidente municipal.

Sin embargo, la información difundida por González González tuvo efecto, y Sebastián Uc Yam, quien –se dice- estaba oculto en algún lugar de Mérida, Yucatán, logró evadir la acción de la justicia una vez más y ahora se encuentra nuevamente amparado.