Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.-El derruido muelle de madera del embarcadero denominado “Ecológico”, al final de la avenida Costera, es un serio peligro para los bañistas, a pesar de denuncias públicas en variadas ocasiones, las autoridades no han reparado en ello.

Victoria Salazar Escobar, llegó con su familia a Bacalar proveniente de Campeche, a disfrutar de la laguna en el atracadero que le llamó la atención por el vistoso mural y su acondicionamiento con material reciclable, aunque se mantuvo con temor por el derruido muelle de madera que representa un peligro para los pequeños que acuden con sus familias a recrearse en el lugar.

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Vecinos aseguran en que varias ocasiones han solicitado su reparación pero no les han hecho caso, a pesar que han sido testigos de lo peligroso que representa para los pequeños que acuden con sus familias a bañarse en el sitio, debido a que al final del muelle, en la parte con mayor profundidad, se encuentra incompleto.

La infraestructura de madera terminó por ceder al paso de las personas y el tiempo, por lo que varias de las tablas que servían de base se rompieron y en su lugar quedó enormes boquetes que obliga a las personas tener que sortearlas para llegar hasta ese lugar. “Un niño de menos de un metro fácilmente se puede ahogar”, señalaron los vecinos.

El lugar fue acondicionado por un grupo de ciudadanos bacalarenses preocupados por la falta de espacios gratuitos para la recreación familiar, para lo cual acondicionaron sillas y bancas con llantas reciclables y con el apoyo de artistas locales pintaron un enorme mural de conciencia ecológica.

Este nuevo balneario público, es uno de los más visitados actualmente por numerosas familias, principalmente locales y de ciudades cercanas como Chetumal o poblaciones circunvecinas, que corren el riesgo de sufrir un accidente. Se intentó localizar al responsable de protección civil del ayuntamiento, pero ningún funcionario pudo dar razón.