Rubi Velázquez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.-Estabilidad económica, tiempo libre y deseo de dejar una huella positiva en los demás, son aspectos con los que cuentan personas mayores de 40 años que quieren un lugar en el voluntariado de organismos civiles, al lado de jóvenes en busca de experiencia laboral.

“Todo cambia y toda ayuda es bienvenida, así que no importa si se trata de jóvenes o adultos, lo único que realmente importa es ayudar”, dijo Martha Gutiérrez, colaboradora en el comedor comunitario de Casane, organismo civil.

Acude al lugar ubicado en la Región 510 dos veces por semana para cocinar y ayudar en el reparto de alimento a los familiares de los hospitalizados en la zona, así como en algunas ocasiones a los reclusos del Centro de Reinserción Social o donde se requiera.  

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“El comedor es una opción de alimento y descanso para todo aquel que lo necesite y me da gusto ser parte de ello”, dijo.

Muchas personas como ella son motivadas por el deseo de ayudar y buscan espacios para colaborar y trabajar en conjunto con estudiantes voluntarios que quieren experiencia y horas de prácticas profesionales, necesarias para titulación en cualquier carrera profesional.  

Por su parte, la Fundación Ciudad de la Alegría cuenta en algunos hogares con el apoyo de voluntarios que contribuyen en las labores del organismo y que con su ayuda permiten llegar con el apoyo a más lugares.

En el caso del Hogar Cobija y Pan, aunque la ayuda es necesaria diariamente, es aún más necesaria los días sábados para preparar lo antes posible los alimentos y ropa que serán transportados en cajas para el reclusorio, señaló Martha García, coordinadora del Hogar Cobija y Pan.