Carlos Calzado/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- La industria del calzado sucumbe ante la entrada masiva de producto chino. No sólo se trata de entrada directa y sin pago de arancel de zapato terminado, se trata del uso de insumos chinos para la confección de calzado mexicano, e incluso, la manufactura de marcas prestigiadas en China para su venta en México. 

La limitada capacidad económica del playense fortalece a la industria china y con ello, la entrada de material defectuoso y con pinturas que contienen metales pesados como plomo y cadmio, materiales que prohibidos por la legislación federal.

En Playa del Carmen existen 80 zapaterías registradas ante la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (Canaco-Servitur), aunque muchas otras no están registradas ante la cámara y por lo tanto el número podría fluctuar entre 80 y más de 110 negocios.

Si bien, muchos de los negocios de calzado venden un 75 a 80 por ciento de producto nacional, los hay aquéllos que únicamente venden producto chino que es el resultado de una práctica económica denominada “dumping” (producir por debajo del costo para vender más barato), e incluso, producto apócrifo que usa marcas registradas en forma de copias. 

En la práctica: 
- 90 pesos cuesta en promedio un par de chanclas mexicanas.
- 40 pesos cuesta en promedio un par de chanclas chinas. 
- Entre 90 y 100 pesos cuesta un par de zapatos de vestir para caballero de origen chino.
- Entre 200 y 350 pesos cuesta un par de zapatos de vestir para caballero de origen mexicano.

Costo real

El margen de utilidad obligado para poder pagar impuestos, sueldos y varios, es del 40 por ciento. Ello quiere decir que si un par de zapatos cuesta 100 pesos, fue comprado al mayoreo en 60.  Con este margen, si un par de calzado mexicano costó 200 pesos, el valor al mayoreo fue de 120 pesos, por lo tanto el par nacional no puede competir en precio con el chino.