Octavio Martínez/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- La intensa erosión registrada en las últimas semanas en Playa Caribe ha deslavado la zona costera más importante de Playa del Carmen y provocado una pérdida de 200 metros de ancho por 40 metros lineales del arenal.

Por su ubicación, la playa mencionada es la más visitada por bañistas locales y turistas, quienes aprovechan su fácil acceso al estar frente al Portal Maya, la terminal marítima y la Quinta Avenida; sin embargo, ayer lucía lejos de los cálculos de hasta dos mil personas que arriban en temporada alta y apenas un par de turistas apreciaba el deslave junto al sargazo que no deja de arribar a la costa.

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La afectación es notoria debido a esta situación, informó Omar Hipólito Ortiz, presidente de la Asociación de Hoteles del Centro de Playa del Carmen, quien sostuvo que debe de haber una reacción inmediata de parte de las autoridades para hacer frente a la situación junto con el arribo se sargazo que no deja de llegar.

“El daño a nuestros arenales, a las dunas, a las pocas playas que tenemos se empieza a tornar incluso, en algunas zonas, irreversible en virtud de la cantidad de sargazo que hay (…) un problema que a todas luces ya se salió de control. Esto nos está dejando pérdidas en cuanto a la ocupación, a la percepción del consumidor”, comentó Hipólito Ortiz.

La organización se encuentra en una ocupación del 40% en alrededor de 800 cuartos de hotel, las cuales se aglomeran principalmente en la Quinta Avenida y cuyos huéspedes hacen uso de las playas que, actualmente están erosionadas, como el caso de Caribe, que es la más afectada.

La Dirección de Zona Federal Marítimo Terrestre (Zofemat) informó que están a punto de lanzar un plan de contención que incluye recuperación de la playa y limpieza de sargazo de manera más intensa.

De acuerdo con fuentes oficiales de la dependencia, están enterados de la situación y confían que en algún momento la marea devuelva las toneladas de arena que ahora ya no existen en las playas del centro.

Sin embargo, para prestadores de servicios turísticos, la situación es poco optimista porque aunado al intenso olor que emite el sargazo podrido, ya no hay playas donde colocar camastros para los turistas.