Carlos Horta/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- Más del 90 por ciento de los lotes asignados en el antiguo panteón municipal se encuentran en situación irregular y en estado deteriorado, pues muchos ciudadanos adquieren los derechos de posesión del lugar por cinco años y no regresan a realizar la exhumación, ni el pago correspondiente para continuar manteniendo la posesión, y así poder usarlo en la siguiente defunción en la familia. Los lotes no son a perpetuidad.

"Las familias olvidan a sus difuntos, existen tumbas de más de 130 años de antigüedad en completo abandono", afirmó el administrador de Panteones y Mercados del Concejo Municipal, Emir Jesús González Pérez.

El antiguo panteón municipal, ubicado en la Avenida 16, se encuentra al tope con sus 582 lotes, de los cuales el 90 por ciento se encuentran en irregularidad; para tener la posesión permanente del lote adquirido, el familiar del difunto tiene que hacer el pago ante la Tesorería Municipal por la cantidad de 675 pesos cada cinco años.

En la mayoría de los casos, el pago se hace únicamente al adquirir la posesión del lote de tierra que es de tres por dos metros, esto para fines funerarios, y los familiares no regresan, ni para hacer la exhumación, ni mucho menos el pago correspondiente al quinto año, con el cual se da el mantenimiento al cementerio municipal, agregó González Pérez.

“La comunidad tiene la costumbre de regresar al lugar de su difunto más o menos en los primeros cuatro años de manera esporádica, pintan, llevan flores, serenatas, ofrendas y limpieza del lugar, y cuando tienen otro descenso en la familia en lugar de tramitar la exhumación, que por ley se hace a los cinco años y reusar el lugar, muchas veces prefieren adquirir otro lote, pues no tienen el deseo ni costumbre de molestar a su difunto”.

Por tales motivos en la administración de nuevo lugar del descanso eterno en Bacalar, ubicado a dos kilómetros de la cabecera municipal, rumbo a la comunidad de Salamanca, se lleva un control más organizado, pues González Pérez afirma tener un censo de los familiares que adquirieron un espacio en el lugar, mismso que acuden darle mantenimiento a sus tumbas de manera anual.

El nuevo lugar de alberge de criptas tiene un espacio para diez mil lotes y únicamente está ocupado el 25 por ciento de su totalidad, estimando una duración útil de treinta años; el lugar fue donado por el ejido de Bacalar, a quienes está asignada un área para sus finados y no pagan derecho alguno por ser los patrocinador del espacio.