Edgardo Rodríguez/SIPSE
CHETUMAL, Q.Roo.- Productores de miel del estado de Quintana Roo esperan que, para este año, las autoridades del gobierno federal los puedan apoyar con la construcción del laboratorio para el estudio de la miel, ya que debido a que el estado exporta la producción a países de Asia y Europa, es necesaria la implementación de este centro de análisis. El proyecto es de poco más de diez millones de pesos, con lo cual se cubriría por completo la construcción y el equipamiento de dicho laboratorio.

Según el representante del sistema producto apícola, Rubén Darío Parra Canto, los productores de miel del estado piden la implementación de un laboratorio dedicado a realizar los estudios necesarios para la producción de miel de Quintana Roo, ya que tan sólo para la miel orgánica que se genera en la entidad, se necesitan realizar varios estudios y análisis para que sea enviada a los países de Europa y Asia.

Recalcó que la importancia de este laboratorio se deriva del valor agregado que le podría dar a la producción de miel y al ahorro en cuanto ciertos estudios, pues para los estudios que se le deben hacer al jarabe de abeja, se tienen que enviar muestras a Alemania, esto para que la producción pueda entrar al mercado europeo, además para que obtengan la certificación de miel orgánica.

Anteriormente los estudios para la miel de Quintana Roo se hacían en el estado de Yucatán, no obstante, el laboratorio que ahí existía, dejó de realizar los exámenes necesarios para la certificación de miel, por ello los apicultores del estado ya se han acercado a Consejo Quintanarroense de Ciencia y Tecnología (COQCYT) para presentar el proyecto de un laboratorio especializado de la miel, dicho proyecto tendría un costo de alrededor de 10 millones de pesos, entre infraestructura y equipamiento.

“La instalación de un laboratorio le daría un plus a nuestra producción apícola, pues como no existe uno en su tipo en toda la península, la miel que producimos ya estaría contando con una certificación desde su lugar de origen, de esta manera ya no tendríamos que recurrir a laboratorios extranjeros, ya que tendría el equipo de HPLC, el cual es un espectrofotómetro que sirve para detectar residuos en la miel”

Aunque hasta el momento no se tiene una aprobación definida para el proyecto, los apicultores ya trabajan con el tecnológico de Felipe Carrillo Puerto y la universidad intercultural maya de José María Morelos para que sean ambas instituciones las que busquen los recursos necesarios para la creación del laboratorio mismo que se ubicaría en cualquiera de los dos planteles.