Quintana Roo, de los más caros para la construcción de viviendas

Actualmente los impuestos para construir una casa de 250 mil pesos en el estado suman poco más de 30 mil pesos.

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Los impuestos en construcción de vivienda aumentó en los últimos años. (SIPSE)
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Agencias
CANCÚN, Q.Roo.- De las 32 entidades del país, Hidalgo y Quintana Roo tienen la carga más elevada de costos indirectos (impuestos, derechos y honorarios notariales) aplicados a la construcción de vivienda, según estadísticas de la Cámara Nacional de la Industria de Desarrollo y Promoción de Vivienda (Canadevi).

En el 2012, los gastos indirectos que erogaron las desarrolladoras en ambos estados representaron arriba de 9% con respecto al costo total del inmueble, según publica El Economista en su portal web. 

El top cinco lo complementan Puebla, con 8.55%; Baja California Sur, con 8.3%, y Morelos, con 8.15 por ciento.

El promedio nacional fue de 6.16 por ciento. De las 32 entidades, 13 superaron ese rango.

En la parte baja destacaron Tabasco y Nuevo León, con 3.92% en ambos casos; Durango, con 4.1%, y Coahuila, con 4.63 por ciento.

La estadística arroja, además, que en los últimos cuatro años, la media nacional en impuestos y derechos a la construcción de vivienda tuvo un incremento marginal pero constante, al pasar de 5.85% en el 2009 a 6.16% en el 2012.

Entre los principales conceptos que presentan la carga más onerosa de los llamados costos indirectos se encuentran el Predial, el impuesto por la adquisición de inmuebles, los servicios catastrales, las licencias de construcción, el número oficial, las subdivisiones y las lotificaciones, así como las relotificaciones.

En algunos estados, la lista puede llegar hasta más de 30 conceptos, asegura Leonardo Garrido Hurtado, exdirigente de las vivienderas en Quintana Roo y Consejero Nacional de Canadevi.

Retos
La nueva política federal de vivienda, que impulsa la construcción de casas de dos recámaras, obligará necesariamente a que el gobierno desregule este sector y otorgue incentivos a las empresas desarrolladoras para cumplir esa meta, de lo contrario, no dejarán de ser sólo buenos deseos, asegura.

“Todo esto de las dos recámaras a quien le pega más es a la vivienda económica de 250,000 pesos, porque si hacemos cuentas y vamos sumando todo lo que hay que pagar, al final del día se repercute en el beneficiario, no es un cobro que hacemos los desarrolladores, sino son costos (derivado de los altos impuestos que las autoridades demandan)”.

Insiste en que es necesario bajar la carga tributaria a la construcción, desregular el sector, dejar de cobrar derechos y sólo así podrá haber beneficios reales a la vivienda popular.

Actualmente, explica que los impuestos directos e indirectos para construir una casa de 250 mil pesos en Quintana Roo suman poco más de 30 mil pesos. La recámara extra que exige la nueva política federal en materia de vivienda sumaría a esos costos al menos otros 30 mil pesos, que a final de cuentas terminará absorbiendo el comprador.

Si la oferta de casas con dos recámaras no la absorbe el mercado por falta de capacidad del comprador para adquirirla, simplemente ocasionará que se deje de construir vivienda popular por falta de mercado, “así de simple”, asegura el entrevistado.

Adelantó que propondrán diversas acciones al gobierno del estado y a los ayuntamientos, así como a la Secretaría de Hacienda federal, para poder acceder a más subsidios que les permitan cubrir los sobrecostos que implicará alinearse con las nuevas directrices de la Política Nacional de Vivienda.

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