Quien apenas tomó las riendas de su municipio y ni tardo ni perezoso se lanzó a la Ciudad de México en busca de mayores apoyos tendientes a mejorar la economía y la calidad de vida de la población, es Nivardo Mena Villanueva de Lázaro Cárdenas, aprovechando el vínculo que existe entre el partido que lo llevó al poder, el PT, con Morena y con el PES, así como la mayoría que conforman en el Congreso, y además abrir los puentes de diálogo con quienes serán las nuevas autoridades federales.

A lo largo de esta semana y en días pasados, el nuevo munícipe lazarocardenista sostuvo reuniones de trabajo con legisladores federales en busca de un mayor presupuesto para este municipio de gran potencial económico-turístico.

De esta manera, Mena Villanueva ha logrado que las próximas autoridades y los legisladores federales volteen a ver a Lázaro Cárdenas y no se queden con la lamentable visión de que Quintana Roo es sólo Cancún, Chetumal y la Riviera Maya.

Diversos fueron los proyectos presentados por el alcalde en la capital del país, como crear tres hospitales en Lázaro Cárdenas, una mejor carretera hacia Chiquilá, dotación de mayor infraestructura para Holbox, apoyo decidido al campo y hasta la disminución de las tarifas eléctricas, en reunión con el próximo director de la CFE, Manuel Bartlett Díaz.

Y es que para ese municipio, prácticamente abandonado durante años, no queda de otra: Es imperativo aprovechar el amplio potencial turístico y agropecuario que existe en la zona, y vincularlo al desarrollo de otros puntos de la entidad.

En breve regresará el presidente de Lázaro Cárdenas y seguramente su población estará ávida de escuchar los óptimos resultados obtenidos en esta gira de trabajo por la Ciudad de México, en donde se sabe que no tuvo un momento de relajación, sino que se mantuvo una apretada agenda.

Sobre todo, es importante destacar que el alcalde abrió ya las puertas de diferentes secretarías y áreas del que será el próximo gobierno federal, lo que le dará la posibilidad de mantener una comunicación de línea directa con las cabezas gubernamentales.

Mena Villanueva debe estar consciente que este apenas fue el primer paso de un arduo trabajo que le espera para los próximos tres años, con posibilidad de agregar otros tres, pero sin duda se trata de un enorme paso hacia la consecución de logros y metas trazadas.

El rostro de Lázaro Cárdenas debe empezar a cambiar y su presidente municipal va en la línea correcta. El diálogo con la federación debe ser permanente y seguir tocando las puertas que sean necesarias, un imperativo de esta administración.

Su joya turística como Holbox, no puede seguir dando esa imagen de destino rebasado cuando está al tope de ocupación. Sus servicios deben ser de la máxima calidad y eso sólo se logrará con el trabajo, la dedicación y la creatividad de los tres órdenes de gobierno.