Ah qué rico es pasear con la familia en el parque del Casco Antiguo de Puerto Morelos. Sentir, respirar esa tranquilidad que brinda la localidad. Disfrutar ahí de un café, un helado o simplemente ver a la gente en paz, a los niños jugar con plena seguridad.

Y qué diferencia también se nota en este punto, hoy con mejoras de su imagen muy propia, muy peculiar, con la esencia que encanta lo mismo a turistas que a la población local.

Cierto es el evidente cambio, pero también lo es la necesidad de culminar esta obra. Faltan, hay que decirlo, los detalles, algunos puntos que contrastan y que piden una renovación, el inicio de una segunda etapa de embellecimiento en este lugar.

Ya se hicieron los trabajos de electrificación subterránea, una magna inversión que merece el reconocimiento. Ahora se trata de acabar con esos puntos, con esos detalles en lo que sería una segunda “manita de gato” en este parque icónico del “Pueblo con Encanto”, del onceavo municipio.

De que Puerto Morelos ya es otro. De que no se puede comparar con aquella delegación abandonada de Benito Juárez, es un hecho, es evidente y es plausible, sobre todo reconociendo que aquí, la inversión pública y privada no va en contra de su esencia muy mexicana, al contrario, la mantiene, la respeta y la defiende.

Y es así porque este que es el municipio más joven del estado (y quizá del país), situado en medio de los dos gigantes turísticos como Cancún y Playa del Carmen, cada día es más atractivo al turista, al visitante que goza lo que en realidad es México, que gusta de la tranquilidad, de la paz salpicada con costumbres y tradiciones de este país.

Por eso es que la autoridad municipal traza ya un proyecto en ese sentido. El gobierno de Laura Fernández sabe de estas necesidades y está consciente del cambio que se requiere, por lo que pronto, muy pronto, iniciará con esta segunda etapa de mejoras en la imagen del parque.

Claro está que hay interés de atraer más turistas que aprecien la serie de bondades, de atractivos que ofrece Puerto Morelos. Pero también le da la justa importancia al gusto de la gente local para que ésta la disfrute y se sienta orgullosa de la zona, que le dé vuelo al sano esparcimiento solo, en pareja o con la familia.

Bien dicen que “los detalles son los que enamoran”. Y si bien el Parque de Puerto Morelos ya presume encantos, ahora la función será cumplir con esa pincelada, con ese último toque en una segunda etapa de Mejoramiento de Imagen.

Puerto Morelos es otro. Puerto Morelos es ya una realidad, un municipio pujante, autosuficiente, una marca propia en materia de turismo, un orgullo para su comunidad y es, también, un trabajo y una lucha constante de sus autoridades que no dejan de avanzar en la labor de mejorar las condiciones de vida de su gente.

Los avances son evidentes, notables y reconocidos.