Se ha iniciado ya, un bombardeo propagandístico y encuestas telefónicas engorrosas y quizás con fines promocionales del quehacer o para saber que se piensa o hacia dónde se encamina el voto para el 2 de junio del año en curso. En lo particular escuché lo más aberrante de una inducción al sufragio, en éstos términos: ¨Vengo invitándolos a votar por mí el 2 de junio, no soy de ningún partido que les ha engañado, soy fulana de tal, gracias y hasta luego¨, qué clase de ahorro en palabras vacías y nada halagüeñas al oído de ciudadanos que exigen otras cosas tangibles.

La propaganda versa en temas que no pueden garantizar que ocurra toda vez que ocupen una curul y se distribuyan las comisiones y se integre la Junta de Coordinación Política, Jucopo, que sustituirá al presidente de la Gran Comisión del Congreso del Estado que operó del 2018 al 2019 y a partir del 1 de septiembre desaparecerá, así como la supuesta eliminación del fuero constitucional, que casualidad que dejara de afectar a las actual legislatura.

Los promoventes del voto a su favor y de partido parecen no tener imaginación, incluyendo los que buscan la reelección; prometen abrogar la Ley de Movilidad, los centros de verificación vehicular, destinar recursos suficientes para la recolección de basura, trabajo de los Ayuntamientos; reformar y desaparecer los aumentos del agua potable que son del orden de 3 a 6 pesos mensuales por disposición legislativa aun cuando los consumos son iguales cada mes; desaparecer el DRAF, y así sucesivamente sin importar que quienes mandan son los partidos políticos y son 25 representantes del pueblo, en general, pero que no es cierto.

Nada en verdad y solamente más de lo mismo; en mi opinión, la elección que llegará otra vez y otra y otra, sucesivamente, ya carece de interés ciudadano que si las reglas y las leyes electorales aplicables se consuman y aplican puntualmente y sin distinciones o influencias, se ven difíciles los triunfos ante el hartazgo del sufragante qué, solamente tendrá una oportunidad democrática en la mampara y urna; surgirá de nuevo la ilusión del cambio, veremos y ¡Al tiempo!