Javier Ortiz/SIPSE
BACALAR, Q. Roo.- La Dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios de la Secretaría de Salud (SESA), concedió la reapertura de dos establecimientos de los 11 de venta de comida en la cabecera municipal, que fueron suspendidos de actividades la última semana de abril pasado, después que se les encontró diversas inconsistencias en materia de higiene y manejo de alimentos.

Lo anterior, derivado de amplio operativo que llevó a cabo esa instancia, tras la muerte de un menor de dos años y medio, de la comunidad de Melchor Ocampo, por la supuesta ingesta de pollo asado en mal estado, que también ocasionó la hospitalización de 12 miembros de la misma familia.

Ángel Sánchez Fernández, coordinador en la zona sur de la dirección de Protección Contra Riesgos Sanitarios, aseguró que ambos negocios, solventaron las observaciones que se les hizo, por lo que ya se encuentran en condiciones de operar, toda vez que sus instalaciones y manejo de alimentos que realizan, dejaron de representar un riesgo para la salud de los consumidores.

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Nueve establecimientos cerrados 

En tanto, los nueve establecimientos restantes, continúan cerrados, aunque continúan aportando las pruebas de las mejoras que están realizando en el interior de sus instalaciones, según las observaciones que se les realizó y será hasta que concluyan con sus adecuaciones, cuando se determine su están en condiciones de volver a operar.

Entre los negocios reabiertos, se encuentra el asadero “El Pollo”, el primero que cerraron, ya que fue señalado como el lugar donde la familia de la comunidad de Melchor Ocampo, adquirió el producto, aunque posteriormente se aclaró que fue otro negocio, ubicado sobre la misma avenida Libramiento, mismo que aún permanece con los sellos de suspensión.

El funcionario de salubridad, señaló que este puente vacacional, los inspectores de esa instancia, realizaron rondines continuos en la cabecera municipal, para asegurar que los establecimientos que se encuentran suspendidos no abran sus puertas, toda vez que no han solventado las anomalías que les fueron señaladas y que se consideran, ponen en riesgo la salud de los consumidores.