Claudia Olavarría/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La mezcla musical de los comercios que operan en el “Callejón de los Milagros”, así como las luces cautivaron a turistas nacionales y extranjeros que acuden al lugar, con la idea de hallar más centros nocturnos como lo que se congregan en Punta Cancún frente a la playa; sin embargo, sólo encontraron oscuridad y edificios desvencijados.

A lo largo de poco más de 100 metros del bulevar Kukulcán, frente al Mar Caribe en la zona de Punta Cancún, se concentra el mayor número de centros nocturnos o antros en la zona hotelera; fuera de eso hay unas cuantas luces (alumbrado público, hoteles y algunos comercios). En el llamado corazón de la zona hotelera “Punta Cancún”, dentro de la zona de bares, restaurantes y discotecas está el “Callejón de los Milagros”.

En la década de los 90, el lugar estaba plagado de comercios de todo tipo; la zona era visitada las 24 horas por locales y turistas. Con el paso del tiempo se convirtió en un lugar poco seguro porque desapareció el comercio y en su lugar quedaron inmuebles abandonados que dieron albergue a personas sin hogar y fauna nociva. Al abrigo de la oscuridad, ahí se cometían actos ilícitos: se volvió una zona insegura y de mala reputación.

Vigilancia policíaca

Empresarios del sector turístico y autoridades han volteado los ojos al lugar: hay presencia policíaca las 24 horas; los comercios regresan paulatinamente y con ello el turismo se vuelca en el lugar, el pasado fin de semana se observó un río de personas que transitaba en el Callejón, pero al llegar al otro lado (frente a la laguna), el encanto concluía, porque sólo había oscuridad y unas cuantas luces. Otros más entraron a los restaurantes y bares a consumir alimentos y bebidas, antes y después de hacerlo a las discotecas que ahí se ubican.

Actividades en el día

Durante el día, el turismo camina por el lugar, pero su mirada es atraída por el inmueble derruido de lo que fuera Party Center; la música de los comercios se mezcla con el agudo y monótono sonido que producen trabajadores de la construcción con la herramienta. Hay dos sitios de venta de tours y actividades acuáticas, así como un local de licuados y pequeños refrigerios a los trabajadores y transeúntes matutinos. Otros locales abren sus puertas a las 11 horas, y unos más hasta las 16 horas.