Benjamín Pat/SIPSE
FELIPE CARRILLO PUERTO, Q. Roo.- Cientos de botellas de refresco quedaron tiradas a la orilla de la carretera federal 184 Muna-Felipe Carrillo Puerto, luego de que el remolque que los transportaba terminó volcado en la zona conocida como “las curvas del diablo”.

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Los hechos se registraron en el kilómetro 155 del tramo José María Morelos-Pool-Yuk, cuando una de las llantas traseras del camión Kenworth, del servicio público federal, estalló provocando que J. Á. M. M., conductor, perdiera el control.

Lo anterior propició que el remolque se inclinara demasiado en una de las curvas para finalmente terminar volcado sobre su costado derecho, regando cientos de cajas de refresco.

Los primeros en llegar al lugar de los hechos, fueron algunos automovilistas y habitantes de la zona, quienes aprovecharon para surtirse de refrescos para toda la semana.

El acto continúa hasta que llegaron los agentes de la Policía Federal División Caminos, lo cual inhibió que las personas continuaran llevándose las gaseosas, aunque al final terminaron por llevarse todo el producto, al declararse la pérdida.

Tráiler con refrescos 

El camión que transportaba los refrescos es un tráiler con placas de circulación 751-DW-7, el cual se supo había salido de la ciudad de Mérida, Yucatán y tenía como destino final la ciudad de Chetumal,

Elementos de la Policía Federal se encargaron de los peritajes correspondientes para conocer el detalle de las causas del accidente así como también el deslinde de responsabilidades.

Después del trabajo de los agentes, la pesada unidad fue trasladada a la ciudad de Felipe Carrillo Puerto en el corralón, mientras se resuelven los asuntos legales por parte de la empresa, dueña de la unidad y el producto.

El saldo del accidente fue únicamente pérdidas materiales, ya que el conductor salió ileso, mientras que la carga se perdió en su totalidad, primero porque algunos se echaron a perder al caer, mientras que el resto terminó en los hogares de quienes andaban en el lugar.