Así, nuestra entidad contaba entonces con alrededor de 84 mil 636 personas en situación de pobreza extrema, es decir, un 6.3 por ciento de su población total, lo que colocó a Quintana Roo en la posición 21 en el escenario nacional.

 

Benito Juárez concentraba 22mil 652 personas en la pobreza extrema y Othón P. Blanco le seguía con 21 mil 980 individuos, es decir, el 50 por ciento de los quintanarroenses en las mismas condiciones socioeconómicas.

 

El municipio de Felipe Carrillo Puerto siguió a continuación con 14 mil 944 personas en la pobreza extrema y José María Morelos con siete mil 892 ciudadanos ubicados en este nivel.

 

José María Morelos resultó ser el municipio con mayor porcentaje de pobreza extrema, con 26.8 por ciento, seguido por Felipe Carrillo Puerto, con el 24.9 por ciento de su población en esta situación.

 

El criterio aplicado para establecer los niveles de pobreza entre la población se basa en seis indicadores sociales: rezago educativo, acceso a servicios de salud, acceso a seguridad social, calidad y espacios de vivienda, servicios básicos en la vivienda y acceso a la alimentación.

 

En este mismo contexto, una persona se encuentra en situación de pobreza extrema cuando acumula tres o más carencias dentro del Índice de Privación Social y que, además, se encuentra por debajo de la línea de bienestar mínimo. Las personas en esta situación disponen de un ingreso tan bajo que, aún si lo dedicaran por completo a la compra de alimentos, no podrían adquirir los nutrientes necesarios para tener una vida sana. Para efectos de este informe, el valor de la línea de bienestar mínimo era de 684 pesos para zonas rurales y 978 pesos para urbanas.