Joel Zamora/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- Autoridades de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) reubicaron a 15 internos con padecimiento del VIH y/o SIDA en módulos y estancias diversas para evitar discriminación de otras personas en el Centro de Reinserción Social (Cereso).

De acuerdo con un informe de la SSP, se trata de puros hombres, quienes mensualmente reciben una cita médica para llevar su tratamiento, además realizan trimestralmente pruebas de laboratorio con cargas virales.

La instancia indicó que la dieta de todos esos internos está basada en nutrientes y los últimos viernes de cada mes se les proporciona una suplementación alimenticia que les permite mantener su salud estable durante todo el proceso de reinserción.

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La autoridad informó que actualmente trabajan con programas de prevención de enfermedades de transmisión sexual al interior del penal; además los pacientes reciben apoyo psicológico y se les proporcionan preservativos tanto para hombres como para mujeres.

La Jurisdicción Sanitaria número uno informó que todos los pacientes son atendidos con dosis única y no con diferentes tabletas, como se hacía años antes.

Para atenderlos, la Secretaría de Salud (Sesa) destina aproximadamente 360 mil pesos y cuentan con medicamentos variados a nivel gobierno, estos tienen un costo de alrededor de mil 900 pesos, dentro del primer esquema.

Población dentro del penal

Actualmente, el penal de Chetumal alberga a unos 816 internos; 242 hombres y 16 mujeres procesados, así como 545 hombres y 13 mujeres que cumplen alguna sentencia condenatoria; la cifra de internos con esta enfermedad representa el 1.8% del total.

De acuerdo con el reciente Diagnóstico Nacional de Supervisión Penitenciaria de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) el penal de Chetumal, tuvo una calificación reprobatoria de 5.61; sobre todo tuvo números rojos en tres principales temas, sobre los aspectos que garantizan la integridad personal del interno, aspectos que garantizan una estancia digna y la reinserción social.

Además de ser deficiente el sistema penitenciario para integrar expedientes técnico-jurídico, el organismo también observó que hay una deficiencia en la separación entre procesados y sentenciados, deficiencias en los servicios de salud, así como deficiencias en la atención a personas internas en condiciones de aislamiento.