Manuel Salazar/SIPSE
FELIPE CARRILLO PUERTO, Q. Roo.- Con una vocación dedicada casi íntegramente a las festividades del mes de diciembre, empezando por el día 12, que es dedicado a la Virgen de Guadalupe, existen en Quintana Roo edificaciones que representan la muestra viva de los alcances que tuvieron los señoríos, hacendados y el clero durante la época colonial en la Península de Yucatán.

Ubicadas la mayoría de ellas en el municipio de José María Morelos, “La ruta de las iglesias”, como ya turísticamente se le conoce a la región, muestra la belleza arquitectónica alcanzada por quienes edificaron los templos que hoy siguen siendo refugio de la fe, de la esperanza y sobre todo espacio de reflexión para las familias de la zona maya quintanarroense que en su mayoría son católicas.

Algunas quedaron a medias, pocas fueron terminadas totalmente y otras perdieron gran parte de su envergadura al ser tomadas como refugios contra el fuego militar en tiempos de la Guerra Social maya que en esta parte de la península vivió sus más grandes momentos de fragor, su clímax y su extinción.

La época de la conquista

Dedicadas casi totalmente a las festividades de diciembre, las estructuras sobrias, pero sencillas al mismo tiempo, elaboradas con un inequívoco sello colonial, nos remontan a la época de la conquista y colonización, situadas en el centro de las comunidades en medio de una amplia plaza rodeada de casas construidas hoy sobre paredones de piedra en algo que alguna vez fueron casas de cal y canto.

La zona rebelde

La arquitectura de cada una de ellas se aparta del modelo tradicional y quienes conocen la zona se dan cuenta que en la región se percibe claramente hasta dónde se tuvo la presencia clara y directa del clero que fue aproximándose hacia la zona rebelde en lo que hoy es Quintana Roo en un afán por evangelizar a los indígenas que peleaban y se rebelaron por sacudirse el yugo de los opresores, las mejores muestras de ese avance que tuvo el clero y la intención de construir espacios para recibir a los indígenas ya transformados en fieles se encuentran en Peto, Yucatán, Valladolid y comunidades limítrofes con Quintana Roo.

Delicadeza y calidad arquitectónica

Edificada hacia fines del siglo XVII, las únicas iglesias de la ruta establecidas en Quintana Roo terminadas en su totalidad, son las de Sacalaca y la de X-Cabil, en donde, pese a su tamaño, muestran claramente la delicadeza y la calidad arquitectónica con que eran planeados en su construcción esos edificios.

Se inicia esta ruta por los paredones y un campanario construidos en Polyuc, otra en Chunhuhub, edificaciones ambas de Carrillo Puerto, pero que no pudieron ser terminadas ante la peligrosidad y el fragor de la lucha armada que se vivió a partir de 1847 en esta zona.