Itzel Chan/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La certificación Blue Flag es una buena referencia para las playas y por lo tanto atrae a los turistas; sin embargo, uno de los principales retos a combatir es la generación masiva de residuos sólidos, ya que entre los 32 arenales galardonados se generan hasta 400 toneladas de basura en menos de 10 días.

El valor agregado que tiene este galardón radica en los trabajos de conservación que se difunden y se realizan en cada uno de los sitios, sin embargo, la fortaleza se convierte en debilidad al momento de no delimitar la capacidad de carga de los sitios, de acuerdo con Francisco España, consultor independiente.

Este año entre recertificaciones y nuevas menciones, se registraron 20 playas que tendrán bandera azul y esto para la economía tiene puntos a su favor, ya que estadísticas realizadas por la Secretaría de Turismo, indican que por cada tres viajeros, al menos dos buscan playas galardonadas.

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Sin embargo, ante el aumento de visitantes, la generación de basura va a la par, y el doctor España indicó que en promedio cada playa produce entre una y dos toneladas de basura al día, es decir, a nivel nacional hay un registro aproximado hasta de 64 toneladas.

El reto que enfrentan las autoridades encargadas de la limpieza de las playas es evitar que estos residuos lleguen al mar, pues el efecto que tendrán en el ecosistema marino será reflejado tanto en la salud de arrecifes, como en la fauna.

Hay casos de algunas playas en las que la afluencia asciende hasta mil asistentes por día y en temporadas altas, esta cifra aumenta hasta 20%. 

Al mismo tiempo, como beneficio para la economía local, los servicios náuticos han mostrado incremento hasta de 30%, tras poseer las certificaciones.

Los sitios que cuentan con la bandera azul registran la llegada de visitantes desde las 7 horas y en ocasiones hay personas hasta después de las 23 horas, debido a la seguridad que hay, sin embargo, si la generación de residuos se divide entre los asistentes, por cada persona se genera desde 500 gramos de basura hasta un kilogramo.

Para Francisco España es importante que autoridades de cada uno de los 17 Estados costeros pongan en práctica el Plan de Ordenamiento Ecológico de Playas y que además se defina la capacidad de carga de cada lugar, aunque el mejor trabajo está en las personas que acuden a los sitios, pues es responsabilidad individual no producir tanta cantidad de basura.