Paloma Wong/SIPSE
CHETUMAL, Q. Roo.- El Ayuntamiento de Othón P. Blanco requiere invertir 25 millones de pesos para resolver el problema de la basura en Chetumal, informó el secretario de la comuna, Jorge Aguilar Cheluja, que el recurso servirá para sanear el actual relleno sanitario y construir uno nuevo, con lo cual pretenden erradicar el problema que genera en los Fraccionamientos Las Américas III y IV, cuyos límites están a escasos 250 metros de la entrada al basurero, según la autoridad municipal.

El entrevistado reconoció que el problema del relleno sanitario no es algo nuevo y que deriva de la falta de atención de parte de administraciones anteriores, e incluso de la empresa Intrasiso que en su momento no realizó las obras al interior, y que están establecidas en la concesión entregada por 30 años para el destino final de la basura, que empezó a partir del 2010.

Para que el basurero tenga un periodo de vida más amplio y mejorar las condiciones sanitarias de los habitantes de asentamientos cercanos, es necesario implementar la pirolisis, o en su caso sanear el actual relleno sanitario y construir uno nuevo.

“Es un problema que data desde hace mucho tiempo, y es necesario concesionarlo o implementar la pirolisis, que es una iniciativa que ya está en el Congreso del Estado. Ahora el presidente municipal está en la búsqueda ante la Semarnat de 25 millones de pesos para sanear el actual relleno sanitario y construir uno nuevo”, adelantó. 

Prevén desborde de la laguna de oxidación

En la visita al interior del relleno sanitario, e incluso a decir de algunos pepenadores del lugar, la laguna de oxidación del área está a punto de rebosar. Además de que la zona se ha convertido en el hábitat de un cocodrilo de dos metros, aproximadamente.

Cabe mencionar que la Procuraduría de Protección al Ambiente y la Secretaría de Medio Ambiente, inspecciona el funcionamiento del basurero municipal debido al desbordamiento de la laguna de lixiviados y podría concluir con algunas recomendaciones al gobierno municipal de Othón P. Blanco.