Claudia Olavarría/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Estudiantes de la licenciatura de Derecho llegaron este viernes a las instalaciones de la Universidad La Salle vestidos con trajes ejecutivos, en colores oscuros aunque en algunas de las futuras abogadas de Quintana Roo, la coquetería no faltó con un detalle en su vestuario que resaltara su femineidad y todos con un portafolios o documentos bajo el brazo con su caso armado.

Las instalaciones lasallistas prepararon seis salas para que los 19 equipos participantes en el primer concurso nacional universitario de juicios orales, litigaran un caso ficticio de homicidio de una pareja con dos presuntos culpables y tres testigos.

Las audiencias fueron presididas por jueces del Tribunal Superior de Justicia del Estado, quienes atentamente desde sus respectivos estrados escucharon los casos de ministerio público y la defensa.

En la sala uno los primeros en entrar fueron los espectadores a la audiencia, momentos después la defensa de los presuntos culpables y el ministerio público, cada uno con la confianza reflejada en el rostro, que luego de un breve saludo  ocuparon sus lugares frente al estrado y una vez que la sala estaba lista apareció el juez  para escuchar ambas partes.

El ministerio público es quien inició la exposición del caso, en donde presentaron un alegato convincente de la culpabilidad de los dos acusados del sexo masculino en contra de una pareja y presentaron a sus testigos de cargo, luego de escuchar atentamente el caso armado por el ministerio público, el juez cede la palabra a la defensa quien de inmediato busca exponer la parte humana de los inculpados y llaman a los testigos de descargo que señalan acciones que ponen en duda por momentos lo expuesto por el ministerio público, lo que dio confianza a la defensa para continuar exponiendo su caso, todo basado en la Ley.

Luego de dos horas y media de la audiencia en la que el juez escuchó atentamente ambas partes, analiza las pruebas y da su veredicto basado en la evidencia presentada y la expresión corporal y facial de los testigos y presuntos culpables. Luego de un breve descanso los mismos equipos invierten los papeles y se abre una nueva audiencia. En algunos casos el ministerio público ganó y en otros la defensa, todo basado en la forma como armaron los casos.

En algunas audiencias los participantes iniciaban nerviosos (se reflejaba en la voz, algunos carraspeaban) y según transcurría el tiempo controlaban los nervios, en otros casos la oratoria y seguridad fue impecable de ambas partes.

Todo el proceso desde que se abrió la puerta de la sala quedó videograbado y durante la misma se prohibieron para la audiencia, grabadoras, teléfonos celulares, cámaras de video y fotografía porque se maneja la “presunción de inocencia”.

Este viernes el concurso de juicios inició a las 12 horas y concluyó a las 22 horas y continuarán las audiencias este sábado a partir de las 10 horas y alrededor de las 14 horas se tendrán los resultados de los tres primeros lugares, de los cuales dos pasan a la fase regional a celebrarse en febrero en Cancún.

Podrán no aplicar leyes en juicios orales

La Dirección de Concentración y Trámite desaparecerá del organigrama de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) en Quintana Roo, al igual que la figura del oficial secretario con la implementación del nuevo sistema de juicios orales, puesto que será el ministerio público quien realizará ambas labores y quien comparecerá ante el juez en las audiencias, anunció Gaspar García Torres, procurador de Justicia en el estado.

El primer abogado de Quintana Roo indicó que con delitos menores iniciarán los juicios orales en Quintana Roo en octubre del 2013, para introducirse paulatinamente en delitos de alto impacto (secuestros, delincuencia organizada, entre otros), que serán abiertos a la población, grabados y no darán pie a la corrupción. Independientemente que hay un margen de tiempo hasta el 2016 para la transición al sistema de juicios orales.

La PGJ seleccionó a 50 ministerios públicos de los 10 municipios para capacitarlos y que conformen una base sólida y el resto continuarán en el sistema tradicional, aunado a que hay un diplomado en puerta que iniciará este mes y en enero una persona de la Ciudad de México vendrá a impartir una capacitación más para todos los actores que  intervendrán en los juicios orales, oficiales y privados. Un ejemplo de estos cambios es incluso en el papeleo, porque lo que hoy se conoce como Averiguación Previa (AP) pasará ser Carpeta de investigación.

En materia de corrupción, García Torres destacó que se tienen grandes ventajas en el nuevo proceso porque permitirá mecanismos alternativos que tal vez eviten un juicio, con ello se eliminarán aspectos burocráticos o diligencias que se prestan a malos manejos a esos actos en lo oculto. En los juicios todo se ventilará de manera pública y el ministerio público ya no tendría negociaciones o asuntos “en corto” que se presten a resoluciones tendenciosas y con ello se lograrán un juicio más justo.

Baruch Delgado Carvajal, presidente de la Comisión Nacional de Tribunales de Justicia de los Estados Unidos Mexicanos y magistrado presidente del Estado de México, señaló que un juez es consciente de la responsabilidad pública que tiene y por tanto debe ser valiente, porque si no lo fuera no tendría la investidura que porta y en tanto aplique correctamente la Ley no deberá tener temor alguno de ataques.

Además que un juez podrá no aplicar una Ley si esta viola los Derechos Humanos del presunto.

Fidel Villanueva Rivero, magistrado presidente en Quintana Roo, indicó estos juicios pueden ser de dos, 15 o un mes dependiendo la complejidad del caso y para poder brindar atención como marca la Ley se crearon siete juzgados en el estado y este año se sumarán dos denominados auxiliares y se planea uno más para Solidaridad y Cozumel, en donde se dicten soluciones en el menor tiempo posible.

Hoy un juez en Cancún tiene una carga de 500 expedientes y con los juzgados auxiliares se podrían atender de 300 a 350 para no generar embudos.

(Edición: Florencio Sabido)