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El helado de yogur no es tan sano como parece, pues contiene azúcar agregada. (Contexto)
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CANCÚN, Q. Roo.- Estamos atrapados en la era healthy, donde ser saludable y cuidar la línea más que ser una elección, se vuelve un deber, especialmente en un destino turístico como éste en donde la apariencia es imprescindible; por eso, cuando el hambre aprieta a horas intempestivas, nos decantamos por los snacks libres de grasa

Sin embargo como dice la doctora Josefina Vicario, de Clínicas Vicario, no nos damos cuenta de que en ocasiones son alimentos procesados con su pequeño porcentaje de grasas saturadas, informa el portal web del periódico español El País. 

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Por eso es hora de desenmascarar a un puñado de impostores saludables:

Muesli. Se considera sinónimo de comer sano, pero el tostado de muchas de estas mezclas se realiza con grasas trans y azúcar (ambos conocidos por aumentar el riesgo cardiovascular). La doctora Elena Soria, nutricionista de la clínica Menorca, advierte: “Para que el muesli sea saludable es mejor que no sea tostado. Leamos los ingredientes de la caja para asegurarnos que existe un equilibrio de ácidos grasos [las necesidades básicas diarias son: 3.000 miligramos de Omega-6 y 2.640 miligramos de Omega-3]".

Mezcla de frutos secos. Una bolsa de mezcla de frutos secos parece el camino más sano para un aperitivo saludable, pero su contenido en sal y azúcares es excesivo. La fruta seca lleva una gran cantidad de azúcar añadida para mejorar el sabor, con el considerable aumento de calorías que ya de por sí aportan el resto de frutos secos de la mezcla. Si tomas una medida justa te aportan vitaminas (como la E) y aceites saludables (Omega 6 y Omega 3), pero, con exceso, son demasiado calóricos.

Aperitivos de 'solo 100 calorías'. Se trata de paquetes que llevan impresa esta leyenda, en cuyo interior suele haber patatas de bolsa o galletas saladas. “Lo importante es ver de dónde proceden sus calorías. Si el 40% son hidratos, el 30% proteínas y el 30% restante grasas saludables, efectivamente, hablamos de un buen aperitivo, pero si son altos en carbohidratos y grasas, tienden a ser más fáciles de comer excesivamente, ya que vienen en porciones pequeñas y no nos llenan. Entonces, ya no son sanos”, dice la doctora Soria.

Barritas energéticas. Suelen estar cargadas de grandes cantidades de fructosa, azúcar, grasas saturadas e ingredientes sintéticos que en lugar de mantenernos en forma pueden atacar directamente a la salud. La doctora Vicario es tajante: "No soy nada partidaria de las barritas energéticas porque siempre dan efectos secundarios no deseados. Al no procurar una alimentación equilibrada, resultan en más cansancio o ansiedad por el hecho de no tomar comida convencional”.

Yogur helado. Sustituir un helado por este tipo de productos, tan en boga desde hace ya unos años, nos suele parecer una alternativa saludable: ¿qué puede haber de malo en un yogur? Sin embargo estos aperitivos contienen un alto porcentaje de azúcares y grasas saturadas en comparación con un yogur normal, y las bacterias lácteas presentes son muy bajas. 

Batidos o Smoothies. 100% natural y a base de fruta, un refresco saludable. ¿Seguro? Depende. En primer lugar, no estamos tomando fruta realmente, solo una parte, su jugo, que añade calorías sin aportar fibra, que es lo mejor de la fruta. Por otra parte, si los hacemos nosotros, solo con fruta y leche, por ejemplo, sabremos qué contienen. Pero si los compramos preparados, atención a las cremas, azúcar o grasas utilizados en su fabricación. 

Galletas de arroz. Es uno de los aperitivos más demandados entre aquellos que apuestan por cuidar su línea, pero todas las expertas consultadas están de acuerdo en que cuentan con más calorías de las que necesitamos realmente a media tarde, a no ser que se realice una actividad física elevada. "Consumidas sin mesura, pueden asociarse al aumento de peso", matizan. 

Chips de verduras, soja, plátano, zanahoria, batata, remolacha... Cuando oímos las palabras mágicas fruta y verdura, nos convencemos de que es sano por mandato divino. Los chips vegetales (tiras berenjena, remolacha, zanahoria o soja fritas) son una fuente rica de vitamina A y C, calcio y hierro. Como tentempié, alivian el hambre y proporcionan suficiente energía para mantener su cuerpo en movimiento hasta la próxima comida. Pero,  son altos en calorías y grasa: una porción contiene hasta 10 gramos. 

En definitiva, el secreto está en la etiqueta. Lea detenidamente los ingredientes, el número de calorías, el proceso de elaboración (prime "al horno" sobre "frito"), cantidad y tipo de grasas y sodio, etc. Y si de verdad quiere un picoteo saludable, coma fruta de temporada. O cualquiera de los alimentos mencionados, pero en pequeñas raciones.

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