Stephani Blanco/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El Instituto Mexicano del Colegio de Contadores Públicos (IMCP), capítulo Cancún, planteó que el Dictamen Fiscal pueda presentarse de manera voluntaria.

La finalidad es aumentar la recaudación y no dañar el trabajo de los contadores autorizados para realizar dicha práctica, por lo que exhorta al fisco a replantear dicha práctica con la propuesta del IMCP, detalló Martín Luna Escobedo, ex presidente del colegio. 

“Hasta ahora los cambios no le han pegado a los despachos de contadores, y el año pasado se registró el mismo número de presentaciones de años pasados, ya que al ser una disposición nueva, las empresas decidieron continuar con la práctica”, dijo. 

También te puede interesar: Negocios entran a la era digital en Cancún

Ahora se solicita al Servicio de Administración Tributaria (SAT), que los contribuyentes puedan optar por esto de manera voluntaria, y no como ahora, que está limitado para aquellos que registran ingresos por arriba de los 100 millones de pesos. 

En Cancún los contadores autorizados son cerca de 30, quienes están promoviendo los cambios de esta práctica, explicó Santiago Rejón Delgado, presidente del IMCP, capítulo Cancún. 

El plazo para presentar el dictamen ante el fisco es el 15 de julio, siendo un documento que emite un contador, en el que avala el cumplimiento del pagador de impuestos de sus obligaciones fiscales y que los montos sean correctos, lo que eleva en la mayoría de los casos la recaudación. 

“Las empresas al hacer este documento tienen la certeza de que primero el fisco revisa al auditor y después a ellos, sin embargo, de no generar más de 100 millones de pesos, esto carece de validez, y el SAT realiza los actos de auditoría hacia el contribuyente”, aclaró Luna Escobedo. 

Para este año la estimación del Colegio de Contadores Públicos es que se emitan 40 mil dictámenes a nivel nacional, la mitad de los del año pasado, lo que incluso podría afectar la recaudación. 

Los cambios de la Reforma Hacendaria permitieron que las empresas presentaran su contabilidad sin necesidad de un dictamen fiscal que emitiera los contadores públicos, lo que en un principio causó el enojo de los profesionistas y ahora plantean un ajuste a este.