Teresa Pérez/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- El mieloma múltiple es el segundo tipo de cáncer sanguíneo más frecuente, después del linfoma de Hodking. Este padecimiento se caracteriza por la proliferación de células plasmáticas en la médula ósea que destruyen los huesos. Con motivo del Día Mundial del Mieloma Múltiple, la Sociedad Americana Contra el Cáncer reveló que padecer sobrepeso u obesidad aumenta el riesgo de sufrir mieloma, al igual que la frecuente exposición a la radiación solar. Esta enfermedad se desarrolla principalmente en pacientes de 60 a 65 años, sin embargo, también se ha registrado casos en personas de 40 años, aunque son muy inusuales.

Por su parte, el Servicio de Hematología del Centro Médico Nacional Siglo XXI, del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), dio a conocer a principios de año que la falta de una cultura de salud preventiva hace que la mayoría de las personas con mieloma múltiple sean atendidas hasta que la enfermedad ha avanzado considerablemente, siendo descubierta por “casualidad”, cuando el paciente se toma una radiografía para conocer el origen de alguna dolencia o fractura.

Este tipo de cáncer se desarrolla en las células plasmáticas de la médula ósea, afectando la producción de células sanguíneas. Con el mieloma múltiple, las unidades plasmáticas se multiplican sin control en la médula ósea y forman tumores en las áreas de hueso sólido.

La enfermedad no tiene cura

Max Saráchaga, director médico de la compañía de biotecnología estadounidense de Amgen, comentó que desafortunadamente, el mieloma no tiene cura. En México, al año se diagnostica en aproximadamente dos mil pacientes. Sin embargo, la supervivencia y calidad de vida de estas personas ha mejorado notablemente en los últimos años, gracias al tratamiento de intensificación con trasplante de médula y a la disponibilidad de nuevos fármacos, que han logrado extender la esperanzan de vida a más de ocho años, cuando hace 10 años, no superaban los cuatro.

Los síntomas

Dijo que entre los primeros síntomas de la enfermedad están fuertes dolores de espalda, fracturas frecuentes y dificultades para orinar, y en ocasiones, infecciones o anemia. Al no ser tan sencillo su diagnóstico, se recomienda la prevención en los adultos mayores, acudiendo a revisión general, por lo menos, cada seis meses.

Síntomas imprecisos

El mieloma múltiple no causa síntomas hasta que llega a una etapa avanzada y puede causar síntomas imprecisos que al principio parecen deberse a otras enfermedades. Una vez que la enfermedad se diagnostica, el paciente debe ponerse en manos de un hematólogo y de un experto en el manejo de la enfermedad, para conocer las posibilidades de obtener un trasplante de médula ósea.