Joselyn Díaz/ SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- La fascinación artística, fantástica y contracultural que envuelve a este movimiento retrofuturista, se basa en una ideología que destaca al individuo entre la masificación, critica al consumismo, destaca el valor del conocimiento, utiliza la tecnología como una herramienta artesanal y el vestuario da vida a personajes de la época victoriana.

El “steampunk” nace como un subgénero literario de la ciencia ficción, influenciado por las letras tanto de Julio Verne, con sus obras “Veinte mil leguas de viaje submarino” (1869), o su olvidado “París en el siglo XX” -que fuera publicado más de 100 años después, hasta 1994-, así como por H.G. Wells, que escribiera “La máquina del tiempo” (1895) o “La guerra de los mundos” (1898).

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Dentro del arte escrito, toma elementos del romanticismo con su intrínseca sensibilidad; la ucronía, que se ubica en una época pasada donde algún acontecimiento sucedió de forma diferente a como ocurrió en realidad; la novela de suspenso y la citada ciencia ficción.

En el “steampunk”, el elegante período victoriano converge con una simulación futurista, es donde los hijos del vapor (“steam” en inglés) se elevan, expresiones que ligan a la ciencia con el arte, diseños de un mañana que pudo ser, testigos del ayer, la ficción en la Revolución Industrial como presente y entre líneas un pensamiento perdido: “La nostalgia de esos pasados que soñaban con futuros brillantes”.

Johannes Serpens platicó para Novedades Quintana Roo un poco más a fondo de este movimiento, el llamado antropólogo del “steampunk” nos da un panorama más a detalle de lo que es esta contra cultura social.

“El ‘steampunk’ es pensar en el Renacimiento, traer elementos de los griegos y romanos a la época actual, traer elementos artísticos, decorativos del siglo XIX y acoplarlos a la época actual. No es recrear una época ni generar un nuevo resultado, es simplemente la fusión entre lo antiguo, lo fantástico y lo actual.

El punto intermedio entre la añoranza y la fantasía”, asevera. La gran expresión del “steampunk” europeo, específicamente en Inglaterra y luego en Francia y España fue consecuencia del movimiento literario, y se deriva de hace unos 30 años, y en México hace unos seis años, aproximadamente.

En el 2011 se creó el foro Steampunk México por Lukyan Corvinus, de Guadalajara, y desde ese momento se comenzaron a generar algunos eventos también en la Ciudad de México; en 2012 se realizó la Feria Internacional Victoriana y el Festival de Steampunk Otómata hace un año. En cuestión musical no hay un concepto “steampunk” como tal, se han dado experimentos como fusiones de bar cabaret con rock progresivo, pero no hay un sonido característico.

República mexicana

“La esencia de este movimiento es atesorar objetos o cosas del pasado, rescatar su belleza y darles una nueva utilidad para no dejarlos morir, por eso se acostumbra mucho reciclar, la metodología de ‘hágalo usted mismo’ y así le damos un toque personal como artistas, pues la mayoría de los ‘steamers’ son creativos y tienen la capacidad de realizar objetos de exhibición a nivel museográfico”, añadió.

En toda la República Mexicana existen varios grupos de “steampunk”, como la Steampunk Comunity Cancún, la cual está integrada por 205 miembros que eligen un personaje con vestuarios específicos, diseñados por ellos mismos, los cuales comulgan con esta filosofía de traer al presente las bellezas del pasado victoriano.

“La mayoría de los integrantes de las comunidades son profesionistas, nos encanta investigar, somos tolerantes hacia las demás personas. Todo lo que hacemos y de qué manera está justificado, sabemos perfectamente la historia para crear desde un personaje, pasando por el arte-objeto, pintura, fotografía y el propio vestuario” puntualizó.