Rubi Velázquez/SIPSE    
CANCÚN, Q. Roo.- A sus 15 años de edad, José Javier Jiménez Rodríguez, estudiante de bachillerato, compagina sus estudios con el ayudar a su familia en la venta de tacos y mostrar ante comensales sus dotes histriónicos en el canto.

Su gusto por la música comenzó a los siete años tras escuchar cantar a sus padres, quienes a pesar de no ser profesionales y considerarse ellos mismos “aficionados”, lo han apoyado a lo largo de su vida para que tome clases de vocalización y con ello busque alcanzar su sueño; compartir escenario con Vicente Fernández y Alejandro Fernández, cantantes profesionales.

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Los intentos para conocer a la familia Fernández comenzaron cinco años atrás al viajar a Jalisco en busca de tener acceso al rancho familiar de los cantantes, sin embargo, en el restaurante propiedad de Vicente le indicaron que él no se encontraba ahí y Javier tuvo que conformarse con cantar con el mariachi del lugar.

Para Javier lo principal es cantar, pero está consciente de que debe estudiar y prepararse para alcanzar sus metas, por ello las mañanas las dedica a tomar clases de desenvolvimiento y vocalización, a la par que ayuda a su padre y a su hermano en el puesto ambulante “Taquería el Beny”, instalado en diferentes tianguis de la ciudad.

Por la tarde el adolescente guarda el mandil y deja de lado su melodiosa voz para convertirse en estudiante de segundo semestre de preparatoria y dedicarle largas horas de su tiempo a prepararse en busca de concluir satisfactoriamente sus estudios medio superior, ya que para el nivel profesional, tiene definido que el canto será su opción principal.

De modo que la familia Jiménez ya planea cómo apoyar al menor en su sueño profesional, dispuestos a “dobletear turnos de trabajo o emprender de nuevo el viaje a Jalisco, porque sabemos que tiene mucho talento y todos nosotros estaremos ahí para apoyarlo”. 

Por ello, el joven cantante apoya a su familia  picando verdura o moviendo la carne, mientras que su hermano meserea y su padre sirve los tacos.

(Foto y video: Sergio Orozco)