Eva Murillo/SIPSE
CANCÚN.- En Benito Juárez hay 20 unidades denominadas Taxi Naranja, un lugar en el que habitan más de 300 mil mujeres (según datos estadísticos del Inegi), mientras que en Chetumal operan 700 unidades donde radican menos de 200 mil.

“El taxi naranja sí ha funcionado pero las unidades no han sido las suficientes para poder llevarlo  a cabo en su totalidad (…) realmente la demanda es demasiada y no hay suficientes”, reconoció la encargada de los programas de prevención en temas de género del gobierno estatal, Silvia Damián López, directora del Instituto Quintanarroense de la Mujer (IQM).

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La funcionaria  negó el fracaso total del programa aunque reconoció que falta aumentar la oferta de unidades para que el objetivo de dar seguridad completa a la usuaria se cumpla, pues la demanda es mucha y las que están en funcionamiento no alcanzan para cubrir todas las solicitudes.

El servicio lanzado en marzo de 2018 tiene como objetivo brindar a las mujeres una opción segura de traslado pues los operadores de las unidades además de estar capacitados para saber qué hacer en el caso de que una pasajera víctima de violencia suba al vehículo, también tienen registrados sus datos –nombre, fotografía y número de unidad- en una plataforma digital.

Damián López nombró a Chetumal como la ciudad en donde más éxito ha tenido el taxi naranja, ya que, según dijo, ahí funcionan 700 unidades.

Adelantó que este año van a lanzar una plataforma que “cubre todos los requisitos para ser un taxi seguro” y para ello trabajan con los sindicatos de taxistas en la entidad.

“En este proyecto entra más tecnología, como cámaras de vigilancia enlazadas con el C5, para que se tenga en tiempo lo que sucede en la unidad, y así cuando las mujeres tomen un taxi tengan la seguridad de que están protegidas”, abundó sin dar más detalles del tema.

Actualmente el Instituto de Movilidad de Quintana Roo (Inmoveqroo) lleva a cabo foros ciudadanos en la zona norte de la entidad para recabar propuestas de mujeres que ayuden a hacer seguro, para ellas, el desplazamiento por las ciudades, pues el género femenino representa el 60% de los usuarios de los servicios de transporte.