Lara Alfaro/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Mariana Perrilliat Nava, Mónica Sanavia y Carolina Flores Amador son las integrantes de un proyecto llamado “Tejiendo México”, que tiene como objetivo identificar las necesidades económicas y sociales de una comunidad, para establecer un modelo de centro productivo y así empoderar y fortalecer las vocaciones de sus habitantes. 

“Fue creado en enero de este año en Cancún, y el trabajo se enfoca en comunidades que tengan entre mil a tres mil habitantes, y en donde por lo menos 30% sea del sector infantil”, señaló Mariana Perrilliat, directora de la fundación. 

Abogada de profesión y maestra por vocación, relata Perrilliat que luego de trabajar por más de 10 años con proyectos gubernamentales, se dio cuenta que la mayoría de las ayudas se quedan en acciones de una sola vez y que hace falta una verdadera transformación en el pensamiento.     

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“Por mi trabajo conocía a las empresas y personas que querían ayudar y a su vez a quienes lo necesitan, así que sólo es cuestión de organizarse, México no tiene un verdadero tejido social, nos limitamos en quejarnos, pero no unimos esfuerzos para resolver los problemas”, destacó. 

“Nuestros objetivos son muy claros, primero queremos identificar necesidades sociales, económicas, aspiracionales y vocacionales, para promover su desarrollo integral, además de empoderar a los líderes locales”, explicó. 

“Tejiendo México” consta de cinco fases que se realizan en un lapso de 18 a 36 meses, parte de proyecto que se adecua a la zona, a ésta se le realiza un diagnóstico para detectar las actitudes y necesidades de sus pobladores, luego se construye un centro comunitario y productivo, se crean alianzas estratégicas para lograr su permanencia y finalmente se miden los efectos sobre la comunidad.

Vocación productiva y creativa

“No llegamos a las poblaciones a decir qué van hacer, ellos mismos tienen que encontrar su vocación productiva y creativa, buscar a los líderes locales, y esos son los jefes del proyecto, nosotros somos un externo, creamos espacios públicos para que se expresen, creen y produzcan”, indicó Mariana Perrilliat. 

Carolina Flores Amador, directora administrativa, indicó que el programa piloto lo realizan en Mahahual, donde llevaron cursos y talleres de formación cultural, deportiva y académica, además de trabajar con los padres para mejorar el entorno familiar. 

“Ha sido una buena experiencia y fuimos testigos de una gran transformación social, gracias a la ayuda privada logramos consolidar este primer proyecto, ahora tenemos como meta poder trabajar en Cancún en las regiones 227 y 228, pero no tenemos apoyo económico de ningún tipo”, finalizó.