Adrián Barreto/SIPSE
PLAYA DEL CARMEN, Q. Roo.- La diversificación de los menús, inclusión de promociones y la creación de una red de concierge de alto alcance son parte de las estrategias que los establecimientos de la Quinta Avenida han tomado para atraer más turistas a sus negocios.

Diente de Oso, un restaurante que lleva año y medio concentrado en el mercado norteamericano con hamburguesas gourmet ha adaptado un nuevo menú de desayuno con el que no contaban, para explotar lo que consideran un nicho de oportunidad.

“Con las hamburguesas estábamos cubriendo solo cenas o comidas, pero ahora estamos incluyendo alimentos muy americanos como waffles, panqueques, mucho tocino, muchas grasas que es un distintivo de la cocina americana y esperamos que eso nos haga más rentable el negocio”, dijo André Vandenabeele, chef de la casa.

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Para otros establecimientos el menú no es suficiente. Miguel Conde, gerente de La Chopería ha creado estrategias que incluyen sponsors para noches temáticas: regalos de sandalias patrocinadas por la marca Reef, pases para eventos musicales y cortesías para los cumpleañeros del mes forman parte de las estrategias para atraer a más clientes.

“Tampoco nos quedamos en dar a la gente. Lo que queremos es que nos conozcan, así que trabajamos con los concierges de los grandes hoteles para que nos recomienden, y claro que ahí es por comisión, aunque debo decir que no representa para nosotros una fortaleza”, dijo Conde.

Por el contrario, Diente de Oso ha apostado por incrementar su red de recomendaciones dentro de los hoteles.

“Hemos buscado herramientas porque nos enfrentamos a que los turistas a veces no salen de los todo incluido, así que tenemos una persona específica para hacer ventas en hoteles de nuestros menús y en esa parte hemos logrado buenas cosas porque los concierges también trabajan por comisión como en el Sandos, el mismo hotel Cacaco, Mayan Palace, de Hacienda Tres Ríos, y estamos buscando incrementar la red”, dijo Vandenabeele.

André opinó que si se quiere sobrevivir en un lugar tan disputado como es la Quinta Avenida hay que realizar estudios de mercado, valorar la información de las ocupaciones hoteleras y crear productos o conceptos con potencial de comercialización, en su caso con el turista estadounidense, el número uno para Riviera Maya.