Al césar lo del césar... y adiós que te vaya bien

Si dirigir un proyecto de empresa no es tu vocación, terminas aburriéndote.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Definitivamente existe gente emprendedora por naturaleza y existe también la gente perseverante y entusiasta, pero por desgracia, no necesariamente son la misma persona. 

Hemos hablado de los atributos que deben tener los emprendedores y empresarios a lo largo de casi ya un año, pero hoy trataremos de los focos rojos que te anticipan que no vayas por determinado camino. 

Así como importante es tener ciertas aptitudes y actitudes, también lo son determinadas situaciones o momentos en los que NO es conveniente emprender.

Me permito señalarte 5 casos en los que te recomendaría NO emprender ni arriesgarte:

1.- Falta de información.- Sabemos que el poder lo tiene el que maneja y conoce la información. Luego entonces no te recomiendo aventurarte a un proyecto o empresa nueva si careces  de datos relevantes que apoyen tu decisión de operar un nuevo negocio o empresa. 

2.- Falta de vocación.- Partiendo desde lo más sencillo, como ser emprendedor real y no un genio de ideas brillantes que no logra aterrizar nada, hasta lo más complicado como el giro al que piensas dirigir tu empresa o proyecto. Si no es tu vocación, terminas aburriéndote.

3.- Inestabilidad en el entorno.- Ya sea económica, social o de mercado, no pretendas emprender si tu entorno es inestable. Sabemos que nada es seguro en la vida, pero cuando hay señales de inestabilidad en tu país, estado o ciudad, es mejor abstenerse.

4.- Exceso de problemas.- No importa si son profesionales, personales, familiares o materiales. Nunca debes emprender cuando existan problemas a tu alrededor o en ti mismo. No es el momento, no es tu hora. Cierra círculos, resuelve y luego emprende.

5.- Falta de decisión.- Si eres una persona a la que le cuesta trabajo tomar decisiones, no lo hagas. Si tienes dudas y no estás seguro de lo que realizas o no estás totalmente convencido de tu proyecto, abstente de emprenderlo. Recuerda que la inseguridad se permea en todos tus colaboradores.

Tomando en cuenta que arriesgas, además de tu capital, tu integridad, creo que valdría la pena evaluar, antes de que te lances con todo a emprender, cada uno de estos puntos mencionados anteriormente. 

Se paciente. Así es que déjale al César lo que es del César… si no, adiós, que te vaya bien.

Lo más leído

skeleton





skeleton