Buen pisotón a algunos callos
Ojalá que esta decisión de limitar a 20 el número de libretas de mar que a diario se expiden, sea imitada por otros funcionarios que se hacen de la vista gorda.
Las oleadas de personas provenientes de diversas entidades que llegaban a Progreso a tramitar su libreta de mar cesaron desde hace unos días cuando en la Capitanía General de Puerto se determinó limitar a 20 el número de documentos que a diario se expiden, para que el funcionario encargado de autorizarlas pueda analizarlas debidamente y rechazar las que no cumplan con los requisitos.
Esto, como era de esperarse, pisó los callos de quienes se beneficiaban con la falta de control sobre estas autorizaciones y quienes a la manera de los coyotes que ofrecen ingresar ilegales a Estados Unidos, hasta organizaban viajes a Progreso, donde a diario se expedían hasta un centenar de estos documentos.
Por el número era imposible de analizar debidamente cada solicitud, de modo que personas sin experiencia o que no cubrían a cabalidad los requisitos para obtener uno de estos documentos, que son requisito indispensable para laborar en un barco o en plataforma, la obtenían aun a riesgo de poner en juego su vida y la de sus compañeros.
Ojalá que esta actitud honesta sea imitada por otros funcionarios que se hacen de la vista gorda y que permiten irregularidades que van desde dejar el paso franco a embarcaciones que salen a la mar sin las debidas medidas de seguridad o sin respetar las disposiciones que la ley establece para esta actividad.