Por lo que ha podido apreciarse con la goleada recibida en Tuxtla Gutiérrez, los Pumas no requieren de un nuevo director técnico después de Mario Carrillo, que es como el García Luna del futbol, sino de una limpia. Pero con una profundidad que cimbre la cantera para satisfacción de los aficionados que vivimos peores vergüenzas que ser diputado del Partido Verde, o formar parte del #Sinfiltro (cómo estará la cosa que Attolini felicita a sus críticos por criticar su chippendelesco show).

Quizá necesiten contratar a Cuauhtémoc Cárdenas Batel para que haga un análisis y confeccione unos Recuerdos de mis Pumas tristes. Algo parecido a lo que hizo en la inauguración del Festival Internacional de Cine de Morelia, donde frente a altísimos funcionarios, el góber díazordazoso, Gael García Bernal y varios, donde puso como lazo de cochino a la administración calderónica debido a sus sangrientas estrategias de seguridad, señaló las intolerancias de la administración de Fausto Vallejo y habló sobre la necesidad de inteligencia, humanidad y cultura para resolver los problemas.

Sí, con el mismo sentido del timing de Moreira que se tardó años y tragedias para señalar a los narcomineros, con el consecuente sentido de la oportunidad del inspector Poiré, que no Poirot, que no dudó en reconocer que sabían todo sin organizar aunque fuera un mendrugo de michoacanazo.

Aun así, fue un poco desconcertante. Sobre todo porque Cárdenas Batel es un político dudoso, grisáceo, desprovisto de liderazgos, cuya única manera de alcanzar el grado de gobernador de Michoacán fue a través del peso específico de un apellido que no le bastó para pasar en el puesto sin pena ni gloria. El clásico político de supuesta extracción izquierdista que pasó con los Chuchos a un centro metafísico que no trasciende desde la tibieza.

Claro, junto NodoyGodoyuna, hasta podría parecer un estadista.

Así, cuando ha tenido la oportunidad de honrar el nombre siempre se nos desinfla, no se compromete. Bueno, hasta su tocayo Catémoc Blanco, a pesar de estar cuarenteando se la rifa en la cancha y gana con los Dorados.

A ver si de la misma manera en que El Peje le ha pedido a Moreira pruebas de sus dichos, también le exije a Batel evidencias de los suyos.

¿O solo lo hizo para quedar bien con Gael?

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