Chico Che' Granier, el árbitro y quién 'pompó'
Para suerte de Granier, la final entre América y Cruz Azul le va a quitar presión.
Pues que dicen las autoridades que no encuentran a Chico Che Granier para preguntarle quién pompó. Y es que le avisaron tantas veces que era carne de presidio que al ex góber tabasqueño le dio tiempo de sacar su colección de chanclas y sus trajes de mirrey, papahw. Está bien que era necesario quemar públicamente a un personaje conocido por su humildad, pero le mandaron demasiadas señales para que emprendiera la huída. Hasta parecía que de eso se trataba.
De todos modos fue interesante que, ante el hallazgo de los 88.5 millones en la refaccionaria de una ex colaboradora del ex secretario de Finanzas de Granier, no solo se le ocurrió decir que todo eso fue un montaje, sino que en el mejor estilo de García Luna Productions recurrió a su secretaria como si fuera su Florence Cassez.
Ahora bien, a mí se me hace que los de la Procu de Tabasco no han buscado bien. Granier debe estar en una caja de huevo El Calvario, en los teleofertones de Neiman Marcus o chupando tranquilo en una cantina de Villahermosa o en un antrazo de Miami.
Para suerte de Granier, la final entre América y Cruz Azul le va a quitar presión, el doño va a poder camuflagearse. Pero como el priista no es muy brillante, es capaz de querer pasar desapercibido vestido de Paul Delgadillo, el árbitro de ese partido ridículamente titulado como #Lafinalsoñada.
Sobre todo porque en su encono fácil, los comentaristas de Televisa, Paco Villa y Pietrasanta, instalados en la histeria pro americanista, prácticamente acusaron al árbitro de atentar contra el Pacto por México, de haber ayudado al nieto de Murillo Karam a madrear a la hija del director del Cisen y de estar coludido con Góngora Pimentel para meter, cual gentleman de Las Lomas, a su ex al tambo.
Esos serían amores verdaderos, ¿los de la telenovela qué?
Tampoco me habría extrañado que le hubieran cargado a Delgadillo los anuncios televisivos del candidato del tricolor en Baja California, Fernando Castro Trenti, en la final panbolera. Creo que tendrías que vender todo el guardarropa de Granier para pagar tal cosa.
Si quiere engañar al enemigo, Granier debería disfrazarse de panista, ahora que están hechos un desmadre. Incluso si acompañara a Gustavo Madero en su recuento de quejas electorales contra el PRI, y nadie se daría cuenta de su presencia.
Chico Che Granier, ¿quién pompó?
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