Energía solar, la alternativa

Se estima que cada año el sol arroja cuatro mil veces más energía que la que consumimos

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En estos pocos días que han transcurrido del primer mes del año, se han dado a conocer varios avances en el manejo de energías alternativas, y de manera especial el uso de energía solar para alimentar grandes fábricas o simplemente casas que ya usan la energía del sol para generar su propia electricidad; dentro de las energías renovables que más se están usando, la solar es la más importante hasta el momento, con inversiones en tecnología e instalaciones millonarias.

Se construyen decenas de granjas solares alrededor del mundo para generar cientos de megawatts de electricidad, con las cuales se genera energía eléctrica a partir de energías verdes o limpias, lo cual ayuda enormemente a combatir el calentamiento global.

Este tipo de energía renovable se usa principalmente para dos cosas, aunque no son las únicas: primero para calentar cosas como comida o agua, conocida como energía solar térmica, y la segunda para generar electricidad, conocida como energía solar fotovoltaica; ambas son consideradas como redituables hasta cierto punto, pues lo ideal sería que con esta tecnología pudiéramos generar en su totalidad la electricidad que utilizamos en nuestras casas, pero hasta el momento no es posible.

Para generar la electricidad se usan las células solares, las cuales son el alma de lo que se conoce como paneles solares, por medio de éstos se produce la transformación de la energía solar en energía eléctrica. Otros usos probados de la energía solar son la potabilización del agua, las estufas solares, destilación de productos y hasta la refrigeración, actividades necesarias y productivas en el desarrollo social y económico.

Se estima que cada año el sol arroja cuatro mil veces más energía que la que consumimos, por lo que su potencial es prácticamente ilimitado y este tipo de energía se considera de las más limpias y eficientes hoy día. La intensidad de energía disponible en un punto determinado de la tierra depende del día del año, de la hora y de la latitud.

Además, la cantidad de energía que puede recogerse depende de la orientación del dispositivo receptor. Se dice que este tipo de energía está asegurada para muchos años, pero aún no es una energía disponible para todas las personas, es muy cara aún y para que los precios bajen la producción tiene que ser mayor, por lo que nos toca la responsabilidad de empezar a usarla y que así en un futuro cercano podamos vivir de una manera más sustentable y teniendo una mejor calidad de vida.

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