Existen muchos temas que me apasionan, uno de ellos es la política, pero uno que mueve mucho mis fibras, que miren que para moverlas da trabajo, es el tema del teatro y, cómo no, si desde chico aprendí a caminar en un escenario. Digo todo esto porque recientemente he estado mirando con detenimiento la forma como ha desplegado sus alas, para elevarlas a un vuelo alto, una mujer que ha roto muchas barreras y que siempre pone por delante el orgullo de ser yucateca.

En el barrio de Sambulá comienza a hilvanarse una historia que aún tiene muchas páginas por escribir, donde los sueños de una niña corrían raudos y veloces forjando lo que en un futuro serían vivencias. Todo lo que encontré en el agua, fue el reflejo de una mujer que tiene arraigado en lo más profundo de su ser el gran amor por todo lo que rodea el misticismo del Mayab, por eso santificarás sus fiestas, con el respeto que ella misma imprime a todo lo que plasma en cada una de sus letras. 

Eres una mujer que inspira respeto y admiración, porque hoy al ver cómo tus sueños se van alcanzando, me hace sentir orgulloso de ser yucateco; al leer en las noticias que escribirías el guión de uno de los eventos más importantes, como es la entrega del Ariel, me regocijé de gusto, como un Puchero de Amor por tantos galardones y logros obtenidos. Sin duda alguna tienes poder, eres una Mestiza Power, y el descanso no existe en tu creatividad. Por eso hoy el nombre de Yucatán se ha mencionado en lugares muy alejados como la Alemania misma, por el Poder de tu Pluma. Hoy seguiré sentado en esta Piedra de Lluvia para decirte que me motivas a seguir creyendo en el Poder del Teatro, y cómo podemos cambiar muchas cosas de este mundo a través de él, y seguir siendo una de las personas que son Las Creyentes de que se sigan escribiendo historias de tu pluma Conchi León. Todavía... Siempre.