Desapego emocional en amor

La persona que se responsabiliza de sí misma y se autorreconoce no sufre del llamado abandono afectivo, ni del desamparo.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Amar sin apegos no implica insensibilizar el amor.- J. Bowlby, psicoanalista                                                 

Siempre es mejor elegir que ser sumisos a lo que otros quieran imponernos. Cuando se actúa por imposición disminuye la autoestima y se rebaja la dignidad de la persona; nos despoja de toda motivación. Cuando hacemos algo por elección voluntaria, aun cuando signifique esforzarnos, es saludable y ayuda a limpiar la mente, se da la autoafirmación y esto es liberador. Eso es el respeto a uno mismo.

La persona que se responsabiliza de sí misma y se autorreconoce no sufre del llamado abandono afectivo, ni del desamparo. Procura sus espacios privados para la autobservación para conocerse a sí misma. Es en silencio cuando hacemos contacto con lo que verdaderamente somos. No hay necesidad de aprobación, ni competencia, ni miedo a la crítica. Encontramos las fortalezas necesarias para afrontar la vida. 

Por esto, es tan importante el respeto a la intimidad. Comprender que convivir con otra persona es también respetar sus ratos de soledad. Es maravilloso relacionarnos sin aferrarnos el uno al otro. Es entender la diferencia entre la dependencia y la interdependencia. 

La dependencia es devastadora. La persona que cae en ella se crea una pseudo inutilidad por el pensamiento constante de: 'no puedo', 'no soy capaz' y se vuelve más y más incapaz de dirigir su vida y hacer hasta las cosas más sencillas por su desidia y miedo a no hacerlo bien. La dependencia nos vuelve inútiles e inseguros, entonces se busca más depender y aumenta la inutilidad; y así continúa la persona sin poder funcionar. Esto es dejar de existir. 

Muchas veces es una dependencia afectiva, por el apego insano a los hijos o a la pareja y que puede empezar con la manipulación: 'Es que tú sí sabes, yo no…' o con el chantaje: 'Cuando me ayudas siento que te quiero más…'. 

La autonomía es el antídoto contra la dependencia y promueve maneras más sanas de relacionarnos afectivamente. Si nos prestamos a 'dirigir', a 'facilitarle la vida' a alguien que sí tiene la capacidad de aprender, pensar y valerse por sí mismo, nos volvemos codependientes y el fracaso de esa relación es ¡seguro!  
¡Ánimo! hay que aprender a vivir.

Lo más leído

skeleton





skeleton