De esos días que dices: mare, ¿será que me animo a ver el futbol? Pues después de darle tantas vueltas decidí chan verlo, mare. Para qué lo hice, cae primero el gol de Costa Rica, me recargo en la pared, esto se está poniendo del color de Obama; al poco tiempo que cae el gol de México, mare mis salbutes volaron por el aire, como cuando vuela en el estadio la cheva, al grito de ahí va el agua, y después que nos meten otro gollll; dije esto sí es terrible, y cuando estábamos a 2 minutos de la tragedia nacional, de quedarnos fuera del mundial, resulta que Estados Unidos le da la vuelta a Panamá, 3-2, jajaja así quisiera darle la vuelta Obama a los del Tea Party, aunque yo sólo conozco el tea de manzanilla, y con el resultado de los gringos nos da la esperanza para jugar el repechaje con Nueva Zelanda, y todo mundo gritando sí se puede, sí se puede. 

Me imagino que motivados por esa euforia son muchos los que están gritando sí se puede, uno de ellos es este huiro que grita sí se puede, que se quede el carnaval en Montejo, aunque se moleste don Martiniano; otro que debe estar gritando sí se puede, es Don Renán para que se resuelva el problema de los ambulantes, ya ven que falló eso de mi primer inventario. Son muchas las voces que se escuchan con el sí se puede, como los artistas yucatecos, pero ellos gritaron sí se pudo, estar en el Festival de la Cultura Maya, aunque no sean de apedillo extranjero, y los que igual gritan sí se puede, son los transportistas para que les autoricen alza de tarifas, pero primero que arreglen sus camiones, y luego pidan aumento, y la que siempre grita en la noches sí se puede, sí se puede, es mi doña, pero la verdad hay días que ni con horqueta reacciona...mi tele para ver novela, ahhh mal pensados, que no.